Zaragoza

El poder, la soledad o la ambición humana son los elementos centrales de las 40 esculturas que conforman la exposición 'Miquel Navarro. Metrópolis lunar', organizada por Fundación Ibercaja en el Museo Goya. Una íntima y personal reflexión del destacado artista valenciano que se podrá contemplar hasta el próximo 22 de diciembre. La muestra contará con una doble sede que se inaugurará en Mobility City a finales de octubre.

La rueda de prensa ha contado con la presencia de José Luis Rodrigo, director general de Fundación Ibercaja; May Forcén, directora del Museo Goya; Miquel Navarro, artista, y Lola Durán, comisaria.

La muestra reúne cerca de 40 piezas que muestran la evolución de Miquel Navarro a lo largo de más de 50 años, representando de esta forma su universo e imaginario más personal. A través de ellas, realiza un símil entre la ciudad y el cuerpo humano, donde la conjunción de múltiples elementos crea una sola pieza.

El simbolismo conforma la parte central dentro de "Metrópolis lunar", combinando referencias a culturas antiguas y a conceptos universales como el poder, la fragilidad o el misterio, con un claro protagonismo de elementos como las torres o tótems y también la luna. La muestra está pensada para conectar con el visitante y motivarle a realizar una reflexión entre lo espiritual y lo material. En cuanto a los elementos empleados en las diferentes piezas, destacan la madera, el aluminio o la plata.

Sin duda, la obra más llamativa dentro de la exposición del Museo Goya es Figura para la batalla, que podrá verse en el patio central con sus más de 3 metros de altura y 350 kilos. Esta monumental pieza, realizada en aluminio marino macizo, representa a un guerrero poderoso, resistente y amenazador, a la vez que protector y en una soledad inmensa: una dualidad propia de la obra de Navarro.

Las culturas antiguas

Uno de los símbolos más reconocibles en la obra de Miquel Navarro son las torres, estructuras verticales a menudo comparadas con tótems que nos muestran su reflexión sobre el poder y la ambición de las personas por alcanzar lo más alto (el cielo), que, a su vez, implica una profunda soledad (la tierra). En esta línea, se encuentran obras como Toscana, Menhir o Astronomía.

Además de las torres, el segundo elemento protagonista en la muestra, como igualmente recoge su título, es la luna que aparece en muchos de los collages expuestos como en Metrópolis con urbe, Luna llena, luna creciente o Poema lunar. La luna en su obra proyecta la dualidad entre lo visible y lo oculto y se muestra como un elemento misterioso frente al sol, que representa la energía, y desvela a su vez, sus ciclos, que en la mitología pueden interpretarse también en la mujer y la naturaleza.

El tercer protagonista conceptual dentro de la muestra es la referencia que la influencia de la cultura antigua tiene en la obra de Miquel Navarro. Proyecto esfinge es una visión, su interpretación contemporánea de una esfinge egipcia, donde se muestra ese origen con la tierra (está hecha con ladrillo refractario) y su conexión con lo divino (la figura se presenta mirando al más allá).

La escultura Aljibe con minarete muestra una clara referencia a sus recuerdos de infancia en Mislata (Valencia) donde el agua y el barro tienen un especial significado, así como la importancia de preservar los elementos más esenciales. 

Actividades complementarias

De forma paralela a la exposición, Fundación Ibercaja ha organizado visitas guiadas para adultos y el programa didáctico "Entre el collage y la escultura con Miquel Navarro" para escolares de Primaria y Secundaria.

Además, se desarrollará el taller dirigido a familias "Universos de barro y metal en el mundo de Miquel Navarro", donde además de conocer la exposición, los participantes podrán crear su propia escultura.

La exposición 'Miquel Navarro. Metrópolis lunar' ofrece, a través de su doble sede, en Museo Goya y Mobility City una reflexión sobre la humanidad, donde se entrelaza lo terrenal con lo espiritual; una dualidad que acompaña a toda la obra del escultor valenciano.