La concesionaria Ribera Salud dejó el Hospital Universitario de Torrevieja el pasado 15 de octubre con los mejores datos asistenciales de la Comunidad Valenciana, basados en las propias estadísticas de la Conselleria de Sanidad. Mes y medio después, los representantes de los trabajadores exigen la dimisión de los gestores, colocados por la consellera socialista Ana Barceló, empezando por la gerente Pilar Santos.
El comité de empresa califica la situación de "insostenible". Médicos de Urgencias y Primaria están dimitiendo dejando el servicio bajo mínimos. Empeoran los ratios. Los profesionales están saturados y temen por su salud y su responsabilidad ante posibles denuncias por negligencias.
El caos ha hecho que los representantes de los trabajadores hayan solicitado una reunión con los alcaldes de los municipios afectados, que se producirá hoy a las 12,30 horas. Acto seguido, el alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón, que se ha reunido con el comité de empresa, ha solicitado una reunión urgente con la gerente del hospital y el equipo directivo, una hora después.
Dolón ha manifestado que "hemos pasado de tener un hospital de referencia nacional y de gran calidad asistencial a convertirse en un centro en el que la falta de asistencia a sus usuarios se ha convertido en su seña de identidad".
La respuesta Sanidad
La Gerencia niega el colapso más allá de las noticias y las fotografías de pacientes en los pasillos que se han ido publicando. En respuesta al comité de empresa Sanidad ha emitido un comunicado en el que aseguran que "se ha garantizado en todo momento la prestación adecuada del servicio".
Echan la culpa de la situación a los profesionales médicos que han renunciado a sus contratos y siguen defendiendo que "la subrogación de médicos sin especialidad MIR no ha sido posible dado que supondría una irregularidad en contra de la normativa vigente". Aunque en Alzira si se permitiese.
De hecho, en el comunicado aseguran que "el director médico del hospital se hizo cargo de manera presencial del servicio de Urgencias, contando con el apoyo directo de especialistas de los servicios de cirugía ortopédica y traumatología, cirugía general, cardiología y oftalmología".
Y resumen, en contra de lo denunciado por los profesionales que el hospital "continúa prestando una asistencia de la máxima calidad, revisando de manera constante la trazabilidad de los circuitos asistenciales y reforzando la dotación de profesionales en servicios clave. La seguridad de pacientes y profesionales en ningún caso ha quedado comprometida como consecuencia de esta circunstancia temporal".
Colapso en mes y medio
Cuando dejó la gestión del Hospital de Torrevieja, Ribera Salud hizo público un informe en el que destacaba que se veía forzada a abandonar el departamento tras llegar a la menor demora quirúrgica de la Comunidad Valenciana. Los pacientes esperaban menos que en el resto de departamentos públicos para una consulta externa. Contaba con más especialidades, y menos derivaciones a otros centros, más eficiencia y una gestión de la crisis COVID ejemplar, según datos públicos avalados por informes oficiales.
En ese informe quedaba patente que los pacientes de Torrevieja esperaban un mes y medio menos que los del resto de hospitales públicos, según los datos oficiales correspondientes al mes de septiembre de 2021. Y los usuarios Primaria tenían una media de 30 días de media para obtener una primera consulta con el médico especialista, muy por debajo de la media de la Comunidad Valenciana.
Además, Torrevieja Salud era un 30% más eficiente que el resto de hospitales públicos de la Comunidad Valenciana, lo que se traducía en un ahorro de 45 millones de euros al año para el bolsillo del ciudadano.
Además, en la crisis sanitaria por Covid-19 el departamento de Salud atendió a un gran volumen de pacientes en comparación con otros hospitales y, sin embargo, registro la menor tasa de contagios entre profesionales de la Comunidad Valenciana y una cifra tres veces inferior a la media nacional.