El Sindicato Independiente de la Comunidad Valenciana ha denunciado hoy un nuevo colapso en el Servicio de Urgencias del hospital Universitario de Torrevieja, revertido a la Sanidad Pública el pasado 15 de octubre. Hay 40 pacientes pendientes de ingreso en planta, de ellos la gran mayoría están ya más de 24 horas en espera, en muchos casos de más de 48 horas y algunos de ellos hasta 72 horas. Algunos en los pasillos.
Desde el sindicato explican que el servicio de observación dispone de 34 camas, por lo que el resto de los pacientes pendientes de ingreso están en boxes del servicio ocupando el sitio que debería de estar disponible para ver pacientes nuevos. Los médicos no pueden ver más pacientes porque no disponen de sitio físico para poder verlos.
Esta situación no es nueva. A principios de mes ya se vivió una situación similar de la que ya informó EL ESPAÑOL. Al mismo tiempo, muchos de los facultativos del servicio están siendo presionados para que renuncien a su contrato suscrito en su día con la concesionaria Ribera Salud. Con ello perderían sus derechos laborales.
Los profesionales han hecho circular un gráfico con el tiempo medio de espera de los pacientes en la época de la gestión público-privada de Ribera Salud (83 minutos) y la actual, con la Conselleria de Sanidad de la socialista Ana Barceló (137 minutos).
Desde el Sindicato Independiente denuncian que se suma la falta de profesionales médicos en el servicio y la imposibilidad de que los médicos que hay puedan realizar horas extras para paliar la situación. Y es que la nueva gerente les informó de que el módulo que se había sacado para horas extras era exclusivo para personal estatutario, los que no proceden de la anterior concesión.
También se les señaló que ninguno de los médicos de Urgencias podía realizarlas, "con lo que esto agrava aún más la situación", aseguran. El conflicto se está focalizando en la posesión del MIR u homologación del título, algo que afecta especialmente en Urgencias y Atención Primaria. Además, muchos todavía no han cobrado.
"Hoy se estima una previsión de altas en planta muy lejos de ser suficiente para liberar camas de observación y boxes de Urgencias, ya que de esas altas también hay que guardar camas para los quirófanos programados que precisen ingreso, las posibles salidas de UCI, etc", continúan desde el sindicato.
"Creemos que si continua esta situación pudiera verse también afectada la programación quirúrgica de esta semana por no disponer de camas para su ingreso". Por esta razón anuncian que solicitarán de nuevo a la Gerencia y a la dirección medica una solución para este servicio. "Los profesionales de urgencias merecen poder trabajar en condiciones y con un buen ambiente de trabajo", concluyeron.