París hacinará a los reos en la cárcel durante los JJOO: detenciones masivas para 'limpiar las calles'
"Una iniciativa policial de tolerancia cero" que se aplicará en el sububio de Sain-Saint Denis, la región con la más inmigrantes y la más pobre.
29 abril, 2024 02:44París se prepara para la celebración de los Juegos Olímpicos 2024 y ha decidido enviar a los maleantes a la cárcel Villepinte. Después de los altercados de la final de la Champions League de 2022 en Saint-Denis y el nivel de alerta terrorista, las autoridades se han puesto como objetivo "limpiar un suburbio pobre de delitos menores y vendedores ambulantes" a través de una ofensiva policial de "tolerancia cero". El fiscal jefe de Bobigny, Eric Mathais, afirmó en una entrevista que "la autoridad penitenciaria debe prepararse para lo peor".
La prisión funciona a casi el doble de su capacidad, un nivel de trabajo que se va a duplicar. Villepinte es un centro de detención localizado en el suburbio de Seine-Saint Denis, a 2,5 km del Paris Arena Nord, que acogerá competiciones de boxeo y esgrima durante los Juegos que comenzarán el 26 de julio. Fue inaugurada en 1991 y es una de las cárceles más pobladas de Francia y que recibe prisioneros del concurrido tribunal de Bobigny, destinado a prisiones preventivas y sentencias breves.
La policía desplegó 4.000 agentes adicionales en marzo y abril, dijo a los periodistas la semana pasada el director de seguridad local de la policía de Seine-Saint-Denis, Michel Lavaud, calificándolo de "limpieza" y diciendo que la operación proporcionó seguridad a los lugareños y "los turistas, el público, las familias de los Atletas". "Es sólo el comienzo, vamos a aumentar la intensidad" antes de los Juegos, afirmó Lavaud.
Esta medida ha causado crispación. Eric Mathais considera que "reducir el número de reclusos antes de los Juegos Olímpicos no es realista" y señala que "necesitamos limitar el número de personas encarceladas, pero es más fácil decirlo que hacerlo, ya que estoy bajo extrema presión de todos para ser claramente más represivo".
Reuters ha entevistado a trece fiscales, jueces, abogados y secretarios que trabajan en el tribunal de Bobigny, quienes dijeron que el sistema de justicia de Seine-Saint-Denis estaba operando al límite de su capacidad y persiguiendo infracciones cada vez más menores en preparación para los Juegos.
En una carta a los fiscales franceses fechada el 15 de enero, el ministro de Justicia, Eric Dupond-Moretti, pidió "respuestas rápidas, contundentes y sistemáticas" a las infracciones que puedan perturbar los Juegos. El portavoz Cedric Logelin dijo que el ministerio estaba tomando medidas para reducir el hacinamiento y prevenir la delincuencia durante los Juegos. Dijo que las decisiones judiciales eran independientes.
3 personas en celdas de uno
El 8 de abril, cuando Reuters visitó Villepinte con la senadora local Corinne Narassiguin, había 1.048 reclusos para 582 plazas en la prisión, según el director Pascal Spenle. La penitenciaría, técnicamente, no puede manejar a muchos más, dijo Spenle.
Reuters habló con cuatro reclusos que aseguraron que pasaban la mayor parte del día en calabozos con hasta tres reclusos cuando la celda está diseñada para uno, compartiendo un baño y duchándose cada dos días. Al menos 17 presos dormían en colchones en el suelo, dijeron las autoridades penitenciarias.
El médico de la prisión, Ludovic Levasseur, dijo que había visto aumentar la demanda de atención de salud mental en los últimos años, mientras que el hacinamiento significaba largas listas de espera para los psicólogos que atendían hasta 60 pacientes cada uno.
Para evitar llegar a un punto de ruptura, los jueces del tribunal de Bobigny casi duplicaron el número de liberaciones anticipadas de Villepinte y de otra prisión el año pasado, a casi 500.
Aun así, Villepinte funcionaba al 180% de su capacidad a principios de abril, frente al 177% en abril del año pasado y al 168% el año anterior, según muestran datos de la prisión y del Ministerio de Justicia.
Antes de un aumento esperado en la preparación de los Juegos Olímpicos, dijo Spenle, Villepinte planea transferir a los reclusos a otras prisiones, liberando 220 plazas. A largo plazo la prisión tendrá una nueva ala, afirmó.
"Soluciones a corto plazo"
Muchos de los eventos olímpicos se celebran en Seine-Saint-Denis, la región con la mayor proporción de inmigrantes entre los departamentos de Francia y también la más pobre.
Los docentes han estado en huelga desde febrero, alegando que las escuelas de la zona carecen de recursos suficientes. Poblaciones sin hogar y nómadas han instalado campamentos y viviendas ocupadas en el departamento. En algunos barrios, los vendedores ilegales se alinean en las calles.
Mohamed Gnabaly, alcalde de Ile Saint Denis, una ciudad de la zona, dijo que los Juegos Olímpicos habían ayudado a que el desarrollo de infraestructuras y viviendas se retrasara durante años debido a la falta de inversión.
Sin embargo, Olivier Cahn, sociólogo del CESDIP, un centro francés de investigación sobre derecho y prisiones, dijo que la dependencia de la policía y de las duras sentencias estaba afectando desproporcionadamente a las poblaciones pobres, inmigrantes y sin hogar. "Lo único que tenemos son soluciones a corto plazo", afirmó Cahn.
"Una iniciativa policial de tolerancia cero lanzada el año pasado que apunta a delitos callejeros como el tráfico de drogas y la venta sin licencia en el área estaba aumentando la población carcelaria", dijo el fiscal Mathais.