Imagen de uno de los puntos del recorrido.
El sendero otoñal perfecto para una escapada este mes de noviembre: cientos de árboles a la orilla del rio
- Durante el recorrido te encontrarás con joyas de la naturaleza con mucha historia.
- Más información: Esta ruta en Alicante es perfecta para este otoño: es fácil y la naturaleza tiene unos colores preciosos
La provincia de Alicante esconde rincones realmente preciosos. Estampas de la naturaleza que puedes descubrir este mes de noviembre y montarte una escapada otoñal única.
Existen múltiples senderos que recorren los paisajes más impresionantes de la provincia. Desde la Font Roja, hasta el Barranco del Infierno, pasando por la Sierra de Maigmó, puedes encontrar las rutas perfectas para ti.
Uno de los senderos perfectos para recorrer este otoño es el del Molí l'Ombria.
Ubicado en el municipio de Banyeres de Mariola, Alicante, se trata de un encantador recorrido en plena naturaleza, ideal para quienes buscan disfrutar de paisajes montañosos, vegetación mediterránea y la frescura de los ríos de la zona.
Este sendero transcurre a lo largo del río Vinalopó, en el Parque Natural de la Sierra de Mariola, y es un espacio ideal para el senderismo, con rincones perfectos para un día de pícnic o para refrescarse en sus pozas naturales.
El recorrido es de dificultad baja, adecuado tanto para familias como para senderistas de todos los niveles. Concretamente, tiene una longitud aproximada de 5 kilómetros (ida y vuelta), por lo que se puede completar en unas dos horas, dependiendo del ritmo y de las paradas.
A lo largo de la ruta, te encontrarás con diversas áreas de descanso y se puede disfrutar de la flora y fauna típicas de la región. Además, podrás ver especies como el pino carrasco, el madroño y el lentisco, junto a diversas aves y pequeños mamíferos autóctonos.
El recorrido
Durante el sendero, te encontrarás con algunos puntos claves como el Molí l’Ombria, antiguo molino harinero desde donde empieza la ruta.
Este molino fue fundamental para la economía local en el pasado y que ahora es uno de los atractivos históricos del lugar. Aunque actualmente está en desuso, conserva su estructura, ofreciendo un interesante vistazo al pasado industrial de la región.
También te toparás con pozas naturales y cascadas, presentes a lo largo del río Vinalopó. Aunque su caudal es modesto, forma pequeñas pozas y cascadas que, sobre todo en verano, se convierten en lugares refrescantes para quienes desean darse un baño en aguas cristalinas y se pueden apreciar desde lejos en otoño/invierno.
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Este sendero también es conocido por su carácter educativo. A lo largo del camino, te encontrarás con paneles informativos que explican la historia, la flora, la fauna y la geología de la zona. Esto lo convierte en una ruta educativa, ideal para realizar en familia y aprender sobre el entorno.
Las vistas panorámicas de la Sierra de Mariola son otro de los grandes atractivos. Los contrastes entre el verde de los árboles, las rocas y el agua del río crean un paisaje muy fotogénico, perfecto para la fotografía de naturaleza.
