La robótica, la automatización, la digitalización y la inteligencia artificial están cambiando de forma vertiginosa el mundo en el que vivimos. Muchas de las profesiones que hoy conocemos, al final de esta década no existirán: operadores telefónicos, agentes de viajes, empleados de banca, grabadores de datos, personal de Atención al Cliente, traductores, la mayoría de los perfiles relacionados con secretaría, administración y contabilidad…
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Se estima que alrededor del 47% del empleo total va a desaparecer y el futuro es tan incierto, como que el 65% de los niños que ingresan a la escuela primaria hoy, terminarán trabajando en tipos de empleos completamente nuevos, que aún no existen.
“No estamos ante el fin de los tiempos: estamos ante un cambio de paradigma, porque desaparecen muchos trabajos para dar paso a otros nuevos. Sólo hay que adaptarse al cambio que produce el desarrollo tecnológico y poner foco en las profesiones que vienen para quedarse. Todos estos profesionales que se mencionaban, pueden hacerse un reskilling y adaptar sus conocimientos y experiencia a la nueva era digital. Recordemos que en España actualmente hay más de 120.000 puestos de trabajo tecnológicos y digitales sin cubrir, y que las empresas no encuentran profesionales adecuados a lo que demandan y necesitan”, asegura Juanjo Amorín fundador y presidente ejecutivo de Qualentum, que ahora dedica su tiempo a la formación de perfiles tecnológicos.
Y continúa: “¿Ejemplos? Los teleoperadores pueden migrar a experiencia de cliente, haciendo argumentarios de cascada, entrenando a las máquinas y realizando distintos procesos que acabarán reconvirtiendo su oficio. Los empleados de banca -ojo, el 95% va a desaparecer- son personas que están en estas sucursales y que cuentan con años de experiencia en finanzas personales y atención al cliente, tienen una oportunidad fantástica con las nuevas necesidades de muchas empresas. Solo tienen que hacer un esfuerzo de reskilling, y hay un gran nicho para ellos en trabajos como análisis crediticio, especialistas en programación de robots, o como científicos de datos”.
Los datos
El experto asegura que hay muchas personas cualificadas que pueden adaptarse a otro tipo de trabajos. “Aquellos que han trabajado de contables en pymes, y han manejado datos a través de excel o similares, son personas totalmente cualificadas para reciclarse en un oficio relacionado con la data. Los datos hoy suponen, junto con la seguridad, dos de los eslabones más importantes de los nuevos oficios del futuro”.
Y añade: “Pero también hay otros muchos sectores que cuentan con oportunidades enormes en relación a nuevas profesiones, como es el caso de la digitalización del sector primario, que necesita agricultores digitales: personas que operen drones que saquen imágenes para analizar la cosecha, que monitoricen sensores en tierra con el grado de humedad…”.
Juanjo Amorín concluye con un dato: “En España, sólo el 38% de la población tiene competencias digitales básicas, el 4% son especialistas en tecnologías y el 20% de las empresas forman a sus trabajadores en competencias digitales. Es urgente, necesitamos un esfuerzo importante de reskilling de profesionales en nuestro país”.