Valencia

La Policía Nacional ha detenido a tres personas por su posible relación con la investigación abierta en torno a la violación grupal que una joven de 18 años denunció haber sufrido el pasado fin de semana. Los hechos se habrían producido en el solar existente entre el cuartel de la Guardia Civil de la Malvarrosa (Valencia) y la popular discoteca Akuarela.



Así lo ha anunciado este viernes la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, en declaraciones a los periodistas tras asistir a un acto con empresarios en Alicante.

Según confirmaron fuentes de la Policía Nacional a EL ESPAÑOL, se está realizando una investigación tras una denuncia presentada en la Oficina de Atención a la Mujer (ODAM) del distrito valenciano de Abastos. La Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) lidera las pesquisas.

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La denuncia, revelada el pasado miércoles por el diario Levante-EMV, relata unos hechos que se habrían producido durante la madrugada del sábado, alrededor de las 5.30 horas.

Tanto la presunta víctima como los supuestos agresores sexuales procedían de la discoteca Akuarela, donde se encontraban de fiesta.

Los testigos ya han comenzado a declarar en un juzgado de Valencia por estos hechos. A la joven la acompañaba una amiga, que permaneció en el interior de la discoteca y no tuvo conocimiento de lo que ocurría en el exterior.

Fue la madre de esta última la que decidió aplicar el protocolo ante agresiones sexuales. Acudieron juntas a un hospital de Valencia, donde la víctima fue explorada por ginecólogos y forenses. A continuación, intervino la Policía Nacional para formalizar la denuncia.

Aparecieron más

Según los hechos denunciados, la joven salió de la discoteca con uno de los presuntos agresores, pero de pronto apareció el resto del grupo, y fue entonces cuando se habría producido la agresión sexual no consentida.

Según los hechos detallados, la agresión sexual en manada se habría producido en un contexto de consumo del llamado 'gas de la risa', cocaína y alcohol.

El relato de la presunta víctima indica que la agresión habría comenzado en el descampado para continuar después en el interior de un vehículo de los denunciados, en el que estos habrían huido.

Los agentes se centraron en identificar el coche para acceder a información a partir de la matrícula.