Tras el trabajado triunfo ante el Alavés, no cesan los elogios al Celta por su racha de cuatro victorias ligueras seguidas. Pese a que el conjunto vigués no lograba esta cifra desde el final de la temporada de Luis Enrique, entre abril y mayo de 2014, Eduardo Coudet asegura que "uno siempre busca mejorar y nunca hay techo". El técnico argentino se encuentra preparando ya el "durísimo partido" del miércoles contra el Getafe, mostrando que no se puede ni "pensar atrás ni más allá del próximo juego".
Además del aplauso de jugadores, directiva, afición y prensa local; el reconocimiento le ha llegado también desde las islas británicas. The Guardian publicaba un artículo hoy en el que lo define como el equipo más divertido de ver en La Liga. El prestigioso diario inglés se deshacía en elogios al clásico 4-1-3-2 del argentino y a como ha explotado a sus jugadores ofensivos.
El artículo está firmado por Sid Lowe, un viejo conocido del fútbol gallego y español. Este periodista londinense repasa toda la trayectoria y filosofía de Eduardo Coudet; incluyendo su estancia en EEUU donde los aficionados versionaron un clásico de los Village People como "Chacho Man". También recoge su icónica frase en Argentina asegurando que "cornudo puede, pechofrío nunca".
Primeras miradas hacia los puestos europeos
Unos días después de su llegada, el Celta tocaba fondo y se situaba como colista. Desde entonces, el equipo vigués ha contado sus partidos por victorias, promediando 3 goles a favor y manteniendo su portería imbatida durante más de 400 minutos, algo impensable hace dos meses.
Esto ha provocado que además de poner tierra de por medio con el descenso, los celestes se asomen a los puestos europeos, algo que no ocurría con una liga tan avanzada desde la temporada 2017-18 con Unzué. La creación de la UEFA Conference League para la próxima campaña, con un único representante español y de menor dificultad que la Europa League, la ha convertido en una competición de interés para el celtismo.
Sin embargo, hay que tener en cuenta la extraña situación de la clasificación esta temporada. Pese a que el Celta ha disputado los 14 partidos posibles, no ocurre lo mismo en todos los equipos. Atlético, Sevilla y Elche con doce encuentros, Getafe con trece o la Real Sociedad con quince distorsionan cualquier fotografía en clave de puestos que se quiera realizar.
Por muy buena racha en la que se encuentre el equipo, la prioridad continúa siendo la permanencia. Las cuentas para este objetivo son claras, y es que a falta de cinco encuentros para finalizar la primera vuelta, el Celta ya tiene la mitad de puntos necesarios para la permanencia "virtual". Solamente la llegada de algún efectivo en ataque en invierno, y siempre condicionado a la salida de algún jugador, podría invitar a pensar en cotas mayores al tener una plantilla tan corta. Lesiones como la de Santi Mina, aunque finalmente no fue tan grave, muestran las limitaciones.
Todo un icono popular para el celtismo
Sus semejanzas con Berizzo, su característico look negro con una bufanda al cuello como única defensa ante la lluvia, su personalidad o simplemente los buenos resultados han creado el chachismo, una nueva corriente de ilusión en una afición que necesitaba un nuevo pastor en el que confiar.
Los creyentes en su filosofía aseguran haberse subido al carro o como ellos lo llaman, la chachoneta. La popularización de este término, identificado con la clásica van de Volkswagen, viene del éxito del verano "La Jeepeta", ya que los seguidores también se hayan "arrrebataos dando vueltas". Las referencias musicales no terminan ahí y Miguel Ángel Román, narrador habitual de los partidos de La Liga, aseguraba que en Vigo se iba a cantar "¿Mami qué será lo que tiene el chacho?".
Pero si hay una canción que el celtismo desea cantar pronto en Balaídos es "y ya lo ven, y ya lo ven, es el equipo de Coudet" que tanto resonó en Avellaneda. No parece extraño que desde su marcha del Internacional de Porto Alegre, cientos de aficionados brasileños hayan invadido las publicaciones del RC Celta pidiendo su regreso.