Vigo y la comarca de O Salnés continuarán esta semana bajo el foco de Sanidade

• Vigo sube al nivel medio de restricciones por el aumento de contagios
• Así será desde el viernes 23 el mapa de Galicia de movilidad, hostelería y restricciones

Tras el anuncio del comité clínico a última hora de ayer, el Conselleiro de Sanidade confirmaba esta mañana la subida de nivel de Vigo, que se convierte en la primera urbe gallega en aumentar restricciones en esta cuarta ola. Se mantiene la preocupación por la evolución de la incidencia en la ciudad, lo que hace que sean necesarias medidas más limitantes para frenar el incremento de los casos activos.

A partir de la madrugada de este viernes, por lo tanto, entrarán en vigor las nuevas medidas que afectan a varios municipios del área sanitaria: además de la ciudad de Vigo, Cangas, Gondomar y Ponteareas, estarán en el nivel medio de restricciones.

En el caso concreto de la urbe preocupa la evolución paulatina del incremento de la incidencia acumulada, que hoy ya está en los 83 casos por cada 100.000 habitantes a 7 días, según ha confirmado la doctora Durán. "La situación es estable pero debemos estar vigilantes", ha afirmado la directora de Saúde Pública.

La evolución preocupa desde hace ya dos semanas, cuando se estableció una vigilancia especial en este concello, y el aumento de contagios y de casos activos hace que Sanidade continúe alerta, al menos, una semana más.

La semana pasada, comentaba Durán, "partimos de 194 casos nuevos por cada 100.000 habitantes a siete días: hoy ya estamos en los 297 casos nuevos". A tres días, además, preocupa especialmente la inestabilidad de la urbe, que sigue sumando muchos contagios a diario.

Sin embargo, se habla de una presión hospitalaria "normal" y estabilizada, con un aumento todavía más lento que en el número de contagios. En caso de que se vea comprometida la situación hospitalaria, como ya pasó con Pontevedra y A Coruña el pasado febrero, se podrá volver a contemplar la posibilidad de cerrar perimetralmente por áreas sanitarias o grupos de municipios.

Comarca de O Salnés

En el área pontevedresa, la alarma se focaliza en la comarca de O Salnés, donde prácticamente ya no quedan municipios en el nivel más bajo de restricciones. El municipio de O Grove, que todavía mantiene el nivel máximo de restricciones, "parece que ha frenado ligeramente el ascenso de estas últimas semanas", por lo que la situación puede haberse estabilizado.

No obstante, desde este viernes se aumentarán las restricciones en Meaño, Ribadumia y Vilanova de Arousa, que pasarán al nivel alto. La hostelería cerrará el interior de los locales, permitiéndose únicamente un 50% del aforo en terraza. Seguirán siendo posibles las reuniones de hasta seis no convivientes en exteriores y cuatro en interiores, así como la movilidad con el resto de Galicia (excepto con los municipios con restricciones máximas).

El conjunto de la comarca, además, preocupa por la evolución de los contagios, que han ido incrementándose de forma lenta en la última semana. "La incidencia de casos por cada 100.000 habitantes a 7 días ha pasado de 94 a 106, por lo que no es una cifra tan grande como para alarmarse". Sin embargo, esta zona permanecerá bajo especial vigilancia, al menos, una semana más.

En el resto del área sanitaria hay varios concellos que también aumentan sus restricciones, como es el caso de Marín, que sube también al nivel alto; y Cambados, Catoira, Vilagarcía de Arousa, A Illa, Meis y Sanxenxo, que se mantienen una semana más en el medio.

El doctor Vázquez Lima, Jefe de Servicio de Urgencias del Hospital de Pontevedra y miembro del comité clínico, ha hablado de que "estamos en un momento de calma tensa, de repunte ligero con tendencia a la estabilización". Por eso, apela a la responsabilidad de los ciudadanos e invita a la vacunación: "es más arriesgado padecer un trombo por contagiarse de Covid que el que existe poniéndose la vacuna".