El tribunal de jurado ha declarado culpable de asesinato con alevosía a J.C.E.I., acusado de embestir intencionadamente con su coche a Jessica Méndez el 17 de marzo de 2022, causándole la muerte. El suceso tuvo lugar en la N-550 en Barro, en una intersección en la que la joven estaba parada y, tras recibir el golpe, fue trasladada herida de gravedad al Hospital Álvaro Cunqueiro, donde falleció horas después.
En el veredicto, que recoge Europa Press, se refleja que el jurado declara probado, por 7 votos a 2, que ese día el acusado circulaba por la N-550 y que colisionó a propósito con el coche de Jessica, que estaba parado y esperando para incorporarse desde una vía secundaria. Con respecto a la alevosía, el tribunal popular ha sido unánime al considerar probado que el acusado actuó de tal manera que la víctima no tuvo posibilidad de reaccionar ni evitar la colisión. Igualmente, ha sido unánime al declarar probado que actuó motivado por la "indiferencia" que le mostraba Jessica, una indiferencia que provenía "de una mujer".
Todos los miembros del jurado también han estado de acuerdo en rechazar la posibilidad de que se suspenda la ejecución de la pena que se le imponga, e igualmente han negado un posible indulto total o parcial. El jurado ha llegado a este veredicto después de unas 12 horas de deliberación, y el resultado ha sido acogido con satisfacción por los vecinos de familia de la víctima, que han estado en la audiencia durante todos los días que duró el juicio y la deliberación. Este martes, de nuevo, han increpado a J.C.E.I. a su salida del edificio judicial, al grito de "asesino" y "culpable".
La Fiscalía ha mantenido su petición de 24 años de cárcel por un asesinato con alevosía y agravado por motivos de género; mientras que las acusaciones particulares también han mantenido sus peticiones, de 22 y 23 años de prisión. La defensa, por su parte, se ha negado a pronunciarse sobre la condena, al considerar que el veredicto de culpabilidad no está bien motivado y supone "una injusticia".
Versión corroborada por el Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico
Tal y como recoge Europa Press, el Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico de la Guardia Civil corrobora la versión que alude a que, en el día de los hechos, Jessica Méndez estaba parada con su coche en el cruce de la N-550 con la pista que conduce a la aldea de Constenla, en Barro (Pontevedra). El acusado, por su parte, circulaba por la nacional cuando, al ver a la joven, giró el volante a la derecha saliéndose del carril y embistiendo la puerta de la conductora, a la que causó un traumatismo craneoencefálico tan grave que murió horas después.
El mismo equipo certificó que el acusado no solo giró a propósito para chocar, sino que no frenó su vehículo en ningún momento. Así, las acusaciones mantuvieron que la maniobra fue hecha de forma voluntaria y consciente, porque J.C.E.I llevaba años acosando y vigilando a la chica, y actuó "resentido" porque ella no le correspondía en sus sentimientos afectivos. Sin embargo, la defensa, por su parte, argumentó que lo ocurrido fue "un trágico accidente" y negó el acoso.