El nombre de Loquillo llevaba mucho tiempo sin estar en boca de todo el mundo. La última vez fue hace unos meses y por motivo de una polémica entrevista concedida a Los 40 Principales, en la que el cantante de rock and roll aseguró que el reggaeton no formaba parte de su cultura. "Yo no soy como otros artistas que ponen a parir la música actual, pero el reggaeton no forma parte de mi cultura, yo soy europeo, no soy latino", aseguró.
Las palabras no fueron muy bien recibidas por los usuarios de redes sociales, que no tardaron en cargar contra el artista tachándole de "clasista". Un discurso al que se sumaron también algunas figuras políticas, como fue el caso de Juan Carlos Monedero. "A veces se empeña en parecer más tonto de lo que es ―porque no es tonto―. Ahora resulta que él nació en el barrio de Salamanca y tienes más cerca lo anglosajón que lo latino", aseguró el politólogo.
Ahora, meses después, Loquillo ha vuelto a situarse de nuevo en el foco mediático. En esta ocasión ha sido tras su participación en el podcast de Carlos Galán, dueño de Subterfuge, donde el cantante ha hablado, entre otras cosas, sobre la piratería. "Tú piensa que la primera gran estafa es cuando un presidente del Gobierno, hace unos años, legalizó la piratería no persiguiéndola", ha asegurado.
"Eso hundió el mercado, hundió los derechos de autor y cambió el sistema. Las cosas no son casualidad. Fahrenheit 451 no está tan lejos. De verdad, os lo juro que no está tan lejos", ha explicado durante su intervención en el podcast, haciendo referencia a la novela distópica que muestra una sociedad en la que los libros están prohibidos.
Pero si ha habido algo que ha llamado la atención de la entrevista de Loquillo en el podcast Simpatía por la industria musical no ha sido solo la reflexión que el cantante barcelonés ha hecho sobre la piratería, sino una anécdota que vivió en una ocasión con dos manteros que vendían sus discos piratas en Las Ramblas de Barcelona.
Tal y como él mismo ha relatado en el podcast, al percatarse de que estaban vendiendo sus discos en la calle, el cantante se dirigió hacia ellos y les dijo la siguiente frase: "Me los voy a llevar y como te vea otra vez te meto".
Tras la confesión, el artista ha trasladado en el podcast, además, una importante reflexión. Y es, nada más y nada menos, que la poca importancia que se le da a los derechos de los artistas en España. "Es que son los derechos de autor y los autores importamos una jodida mierda. Cuando en un país de autores como España, matamos a Lorca, ¿qué esperas?", ha planteado.
Durante la entrevista, Loquillo también ha hablado sobre las diferencias entre Francia y España en relación a la venta ilegal de discos y otros productos musicales. "Tú haces eso en París con un autor francés y verás la que te cae. Pero no por la autoridad, sino por el propio francés, que ama su cultura y la defiende. Aquí los autores somos unos cantamañanas, unos sinvergüenzas", ha confesado.