Desde que tenemos el poder de aupar o hundir la reputación de los negocios invirtiendo cinco minutos de nuestro tiempo en dejar una reseña, la hostelería se ha quedado a merced de la buena fe de la gente. Aunque mucho más mejorados los sistemas de puntuación, pudiendo retirar determinados comentarios con causa justificada, lo cierto es que las mejores reseñas se hacen virales con rapidez en España y ya conforman un género en sí mismas.
Una de las cuentas más populares en este tipo de contenidos es Soy Camarero que, entre sus habituales denuncias relacionadas con ofertas laborales abusivas en el sector, también tiene tiempo para rebuscar y compartir las reseñas más polémicas. En este caso, han sido únicamente tres palabras las que han bastado para sacar de quicio al hostelero de turno, que no ha escatimado en insultos para la clienta.
"No tiene wifi", escribió en el espacio de reseñas de Google, dándole al local un par de estrellas. El propietario tardó tres meses en responder y viendo la calidad de su prosa no nos extraña lo más mínimo. "Me acuerdo de usted perfectamente, señora", empieza su réplica, para constatar que "se acercó a preguntar si teníamos wifi". "Le dijimos que no y se marchó sin ni siquiera probar ninguno de nuestros productos, diciendo que se pasaría a comer más tarde", añade.
"Ni wifi ni cerebro"
"Le respondimos educadamente que le esperábamos después a usted y a su familia", continúa el propietario del local hostelero, lamentando que "nunca vino". A partir de aquí el tono cambia drásticamente: "Aun así tiene los santísimos cojones de puntuarnos con dos estrellas sin ni siquiera haber probado nuestra comida", le dice a la mujer, echándole en cara que "no habla ni de nuestro producto, ni de la atención recibida, ni de la comodidad del establecimiento":
"Su único argumento es 'no tiene wifi'. No, no tenemos wifi, somos una pizzería, no un locutorio. No es usted más imbécil porque no entrena dos veces a la semana", le espeta a la autora de la reseña, reflexionando que "si Google permitiera puntuar a gente como usted también le daría dos estrellas. No por no tener wifi, sino por no tener cerebro". El tuit ha tenido más de 15.000 reacciones, sembrando la polémica entre los tuiteros, que mayoritariamente han aplaudido al hostelero a pesar de haber empleado insultos:
La propia cuenta de Soy Camarero ha aclarado que tampoco le gusta el tema de los insultos, pero que imaginan a un propietario harto de este tipo de reseñas y justifican así su contundente réplica.