El cáncer se ha cobrado una nueva víctima, injusta como todas, y especialmente dolorosa dada su juventud: Mariona García, la hija mayor del exfutbolista y entrenador Òscar García Junyent. La primera de las tres hijas del catalán, de tan solo 21 años, llevaba tiempo plantándole cara con entereza a la enfermedad y contando con el respaldo incondicional de su familia. Su padre ha querido despedirse de ella este jueves en sus redes sociales con una hermosa fotografía y unas emotivas palabras.
"Vola alt, amor meu!", escribía en catalán ―vuelva alto, amor mío― el que fuera jugador del F. C. Barcelona y del Espanyol. Junto a sus palabras ha compartido una foto de ambos, sonrientes, disfrutando de la vida en un día del que seguramente García se acuerde al dedillo: ella subida a su espalda, en el campo. Un recuerdo bonito que ahora le sirve para decirle adiós a su hija con la tristeza inevitable que supone una tragedia así.
Entrenador del Brighton inglés, del Maccabi de Tel Aviv, del club austríaco Red Bull Salzburg, del francés AS Saint-Étienne y del griego Olympiakos, en 2019 regresó a España para capitanear el banquillo del Celta de Vigo. Durante aquella temporada ya tuvo que ausentarse en algunas ocasiones por el estado de salud de su hija. Finalmente, recaló en otro club francés, el Stade de Reims, donde permaneció hasta el pasado mes de octubre.
Comunicaba entonces a los aficionados galos que tenía que regresar a Barcelona por un asunto importante. La publicación de despedida en Instagram y también Twitter se han llenado de mensajes de pésame a Òscar García, especialmente emotivos los que han llegado desde algunos de los clubes en los que militó como jugador o entrenador, como es el caso del Barça, el Espanyol o el Celta de Vigo, que han querido expresar sus condolencias:
Sus otras dos hijas, Jana y Emma, también han querido arropar a su padre, recordándole que Mariona estará siempre presente junto a ellos. En el caso de la primera, le ha dedicado asimismo un precioso texto a su hermana, diciéndole lo "orgullosa que estoy de ti, siempre sacando fuerzas de las que ya no quedaban", asegurando que la recordará "con una gran sonrisa en la cara" y prometiéndole que "disfrutaré de lo bueno de la vida como me has enseñado".
Le agradece los cuidados que le ha proporcionado "estos 19 años" y que hubiese sido "el mejor modelo a seguir que he podido tener". "Aun no soy capaz de imaginarme una vida que no sea a tu lado. Descansa y vuela muy alto, que te lo mereces", ha escrito.