Lo que ha hecho Julio José Iglesias para presentar públicamente a su novia Vivi Di Domenico es la enésima demostración de lo importante que es la perspectiva de género, sobre todo cuando uno se dedica a la comunicación y al marketing. Si alguien hubiese tenido unas mínimas nociones sobre ello, habría prohibido tajantemente que el hijo de Julio Iglesias hiciese entrar a su pareja al photocall tapada con una sábana para destaparla después como si fuese una placa inaugural. No es de extrañar que las críticas le sigan lloviendo a estas horas.
La grotesca imagen se produjo este pasado jueves, cuando Julio José reaparecía públicamente en España como embajador de la firma de joyería Ghost, cuya imagen corporativa es la de un fantasmita sonriente. Su relación con Vivi Di Domenico, a la que lleva 19 años, ya era pública en las redes sociales, pero nunca había pisado con ella una alfombra roja. Así, pensando que sería una idea espectacular, el cantante la hizo pasar cubierta por una sábana metalizada y el logo de la marca.
Poco después de la llegada del fantasma misterioso, Iglesias anunciaba que iba a destaparlo y contaba hasta tres antes de retirar la tela y descubrir a su pareja, sonriente y bellísima: "¡Ohhhh!", se escucha exclamar al público en el vídeo que se ha hecho viral, mientras Julio José la agarra por la cintura para besarla. Apenas unos segundos de escena que, con toda seguridad, no han transmitido lo que pretendían, puesto que les ha resultado una ocurrencia machista a gran parte de las redes:
Las críticas no se hicieron esperar. La mayoría de los que se han hecho eco de la inusual presentación, consideran que Julio José ha cosificado a su pareja tratándola como un objeto, como si fuera un coche o un mueble nuevo que quería mostrar. Además, en el contexto del Mundial de Qatar en el que estamos viendo ―y normalizando en muchos casos― que las mujeres vayan tapadas, el disfraz escogido chirría más que nunca:
Fundamental tomar nota para evitar este tipo de bochornos.