"Des-pa-ci-to, quiero respirar tu cuello despacito, deja que te diga cosas al oído para que te acuerdes si no estás conmigo. Des-pa-ci-to, quiero desnudarte a besos despacito, firmo en las paredes de tu laberinto y hacer de tu cuerpo todo un manuscrito". Lo más seguro, salvo que sean ustedes las personas más afortunadas del planeta, estos versos se les habrán hecho conocidos. Con ellos, hemos retrocedido hasta 2017, cuando nadie podía escapar a la melodía.
No había celebración, verbena de pueblo o emisora de radio que pudiese escapar al gusano musical que fue la canción de Luis Fonsi y Daddy Yankee. A todas horas, en todas partes, estaban ellos paladeando cada sílaba: des-pa-ci-to. Insoportable. Y eterno, porque tuvo que pasar mucho tiempo hasta que el tema que ganó cuatro premios Grammy Latinos en aquel año pasase a mejor vida.
No obstante, Despacito ha vuelto. No se asusten, no se trata de ninguna versión musical que vaya a taladrarnos la cabeza en los próximos meses (que ya sería lo que nos faltaba, la verdad sea dicha), sino de una hilarante teoría apocalíptica que logra culpar a la canción de todos los males que han azotado a la humanidad desde la fecha de su estreno, del que se han cumplido ya cuatro años.
La culpa es de Despacito
El tuitero Pentotal (@PentotalSadico), que nos tiene acostumbrados a un finísimo y peculiar sentido del humor en Twitter, ha hilvanado uno de los mejores hilos de humor de las últimas semanas teorizando sobre ello:
Primeramente, pasó a enumerar varios de los sucesos relacionados con la canción:
Para terminar con el fatídico 2020 y su versión mejorada de 2021 y exponer una conclusión sin fisuras:
Lo cierto es que su teoría sobre Despacito ha iluminado a muchos en Twitter:
Quizás deberíamos haber hecho como Malasia y prohibirla cuando aun estábamos a tiempo.