Una patrulla de agentes de la Guardia Civil de Sevilla ha salvado a una familia de una posible tragedia en la tarde del 31 de julio. Observaron un coche detenido en el arcén de la autovía A-66, a la altura de Las Pajanosas, en el municipio de Guillena (Sevilla).

De su interior salía una familia de forma apresurada, debido a que estaba ardiendo la zona del motor del vehículo. Viajaba en el coche un matrimonio y sus dos hijos, uno de ellos un bebé.

La Guardia Civil utilizó los extintores de los vehículos oficiales, logrando apagar las primeras llamas y deteniendo el incendio antes de que se extendiera. La rápida acción de los agentes fue clave para evitar mayores consecuencias.

A su vez, otros agentes gestionaron la llegada de los servicios de emergencia y pusieron a la familia fuera de peligro, encargándose también de regular el tráfico y señalizar a los conductores para reducir el riesgo de accidente.

A continuación, los bomberos enfriaron completamente el vehículo para que pudiera ser retirado de manera segura.

La operación finalizó con éxito, sin víctimas ni mayores daños, destacando la importancia de la coordinación entre las diferentes instituciones de cara a los incidentes en la carretera. La intervención ha sido realizada por agentes de la USECIC (Unidad de Seguridad Ciudadana) de la Comandancia de Sevilla.