La Catedral de Sevilla ha abierto una convocatoria de empleo para ocupar una plaza como organista auxiliar. Podrán acceder a ella músicos con experiencia y con formación específica en este instrumento.
Desde inicios del siglo XX, los Órganos de Coro del templo, situados bajos los arcos torales que flanquean la sillería coral, componen un solo instrumento. No obstante, suena en las dos cajas, la situada en el lado de la Antigua y la del lado de San Francisco.
Los aspirantes a esta plaza tendrán que trabajar con un centenar de juegos repartidos en cuatro teclados manuales, así como con un pedalero. Se activa con una única consola por conexión eléctrica entre los dos muebles. Este mecanismo se aplicó por primera vez en España, en 1901, por el trabajo de Aquilino Amezua.
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La Catedral de Sevilla ha contado con otros seis órganos distintos a lo largo de sus 500 años de existencia. Los de Fray Juan (1479), Francisco Ortiguez (1733), Valentín Verdalonga (1831), maese Jors (1579), Diego de Orío (1725) y Jordi Bosch (1779).
Plazos y requisitos
El plazo para las solicitudes ya está abierto y finalizará el 22 de marzo de 2024, que será Viernes de Dolores. Hasta la previa de Semana Santa, la Catedral solo aceptará solicitudes de personas mayores de 18 años.
Todas ellas deben tener el título superior de música en la especialidad de órgano. Además, se requieren conocimientos sobre la liturgia. El trabajo se realizará durante el turno de mañana, por lo que se necesita disponibilidad en esta franja.
Los interesados en el puesto podrán presentar su candidatura en el correo electrónico registro@catedraldesevilla.es. En el mensaje debe haber un texto para opositar al puesto, copia del DNI, copia del título superior de música y el currículum vitae.
Sujeto a varias reformas
Han sido varias las reformas a las que se ha sometido el órgano actual de la Catedral de Sevilla. Una de ellas fue en 1973, a cargo de la Organería Española de Ramón González Amezua.
Ya en 1996 fue el alemán Gerhard Grenzing quien asumió una ambiciosa renovación patrocinada por la Real Maestranza de Sevilla. Desde ese momento, el instrumento recibe mantenimiento periódico con el objetivo de mantenerlo siempre en perfecto estado.