Netflix estrenó el primer día del año Engaños (Fool Me Once) de Harlan Coben, y los espectadores cayeron rendidos ante los giros de este adictivo thriller. Tanto, que se ha convertido en la serie en inglés más vista en la plataforma en 2024, según el informe publicado esta semana.

Y no nos extraña. A los 13 minutos del primer episodio, Maya Stern, una veterana del ejército que acaba de enviudar, ve a su marido muerto jugando con su hija en la grabación del día anterior de una cámara de vigilancia que había escondido en la habitación de la pequeña. Dos minutos después, la niñera le rocía un spray de pimienta antes de huir con la tarjeta SD. No es de extrañar que una serie que quema cartuchos tan pronto haya enganchado inmediatamente al público de Netflix.

Así comienza este thriller basado en una novela del prolífico y premiado autor de novelas de misterio estadounidense, que ya ha visto convertidas casi una decena de sus obras como series y películas. Varias de ellas en Netflix.

Todos los personajes de esta miniserie trepidante se embarcan en una búsqueda de la verdad que destapará secretos estremecedores que cambiarán sus vidas para siempre. El subinspector Sami Kierce dirige la investigación del asesinato de Joe mientras lidia con sus propios secreto, y los sobrinos de Maya tratan de dilucidar el asesinato de su madre, ocurrido unos meses antes.

¿Debe Maya creer todo lo que ve con sus propios ojos? ¿Hay una conexión entre la muerte de su marido y su hermana? Para encontrar respuestas, deberá enfrentarse a profundos secretos y engaños de su propio pasado antes de poder enfrentarse a la increíble verdad sobre su marido... y sobre sí misma. Y al hacerlo, tendrá que lidiar también con la poderosa y rica familia de Joe y a su suegra Judith Burkett.

Como suele ocurrir con las series de Coben, los giros mantienen en vilo a los espectadores, y esta no es una excepción. 

La inspiración de la novela

El autor le explicó a Netflix durante una proyección del primer episodio que todo empezó con el personaje de Maya después de visitar una base militar en Kuwait y otra en Milton Hall, en Inglaterra del Norte.

Allí conoció a una mujer que fue la primera piloto de helicóptero militar que luchó en combate con la que tuvo una larga charla. Quería que fuera uno de sus personajes, así que empezó con eso. Entonces, surgió la idea de la "nanny cam", las cámaras ocultas que la gente suele poner para vigilar a las niñeras de sus hijos. 

"Todas mis amigas de entonces tenían una y de tanto escucharlo un día pensé, '¿y si un día realmente vieran algo que les sorprendiera?'. Con esos dos detalles fui armando la historia y me senté a escribir". 

Se rodaron escenas en Almería

La serie se desarrolla en Winhurst, un pueblo ficticio del Reino Unido, para el que eligieron a Manchester y sus alrededores como el escenario principal, siendo uno de los lugares que Maya visita con frecuencia la mansión Farmwood, propiedad de su suegra, Judith, que los fans de Peaky Blinders la reconocerán como la residencia principal de Tommy Shelby en la serie de BBC. 

Las escenas de Maya en la época que estuvo en el ejército fueron las únicas que se rodaron fuera del Reino Unido, para las que el equipo se trasladó a España, en localizaciones de Almería.

"Tiene grandes extensiones casi desérticas, donde solían rodarse los viejos Spaghetti Westerns. Necesitábamos un lugar como base militar en un clima cálido, así que funcionó perfecto. Hicimos una gran acrobacia allí cuando tuvimos que hacer explotar un coche", reveló la productora.