Tras la tormenta, parece que llega la calma a Netflix. El fin de las cuentas compartidas ha sido un terremoto que ha sacudido los cimientos del gigante del streaming. Un melón que tomaron la decisión de abrir, a pesar de la crisis reputacional y bajas a las que se enfrentarían en un primer momento, empujados por la necesidad imperiosa de que la compañía aumentara el número de suscriptores totales.
Tras una prueba piloto llevada a cabo en febrero en España, Portugal, Canadá y Nueva Zelanda, la medida más polémica que ha tomado Netflix en su historia se extenderá a lo largo del segundo trimestre a Estados Unidos y gran parte del mundo. Pero Netflix ha sacado un as bajo la manga que se guardaba para evitar las desuscripciones, conseguir volver a captar a los antiguos usuarios y convencer a los que nunca se han planteado darse de alta por su coste.
La compañía ha comunicado en una carta a los inversores, que ha mejorado su plan más económico, el "Estándar con anuncios". Dicho plan con un precio de 5,49 euros, solo contemplaba hasta ahora una conexión y calidad 720p (HD), además de incluir anuncios, por lo que no era una opción para la gran mayoría de los usuarios de la plataforma. Y si querías una resolución de 1080p (FullHD) -lo mínimo en 2023-, además de una conexión extra, tenías que desembolsar hasta 12,99 euros al mes. Un precio "mínimo" demasiado alto en comparación con otras plataformas de streaming.
Con este último movimiento, Netflix le ha dado la vuelta a la situación, mejorando sustancialmente el plan. Mantiene el mismo precio, pero pasa a contar con una resolución de 1080p (FullHD) y dos conexiones simultáneas.
Es verdad que el plan tiene publicidad (otra de las claves que encierra este nuevo paso que ha decidido dar en su estrategia la compañía), pero también que su coste es de 5,49€. Siendo, ahora sí, una opción real para atraer a muchos usuarios. La compañía vuelve a ganar así la narrativa, por que, ¿quién no va a tener Netflix por poco más de 5 euros?
Recordemos que otras plataformas como Amazon tienen un coste de 4,99 euros, HBO Max de 8,99 euros o Disney+ de 8,99 euros al mes. Todas ellas, eso sí, sin anuncios. Pero en un precio igual o ligeramente superior que el apodado gigante rojo del streaming.
Netflix ha declarado estar "satisfecho" con el progreso del plan "Estándar con anuncios", que se lanzó en noviembre de 2022, y ha señalado que sus ingresos con este plan superan ya a los del "Estándar".
Según un estudio de Kantar en nuestro país publicado el 16 de febrero de 2023, cuatro de cada diez nuevos suscriptores han optado por la opción con publicidad. Y en Estados Unidos, ya son un millón los suscriptores de este nuevo plan.
También que gracias a los últimos acuerdos de licencia, el 95% del contenido de la plataforma a nivel mundial ya está disponible también en el plan con anuncios. A diferencia de los otros planes sin ellos, los suscriptores no pueden ver algunos títulos debido a restricciones de licencias y aparecen con el icono de un candado cuando los buscas o te desplazas por Netflix. Una de las mayores reticencias de los usuarios a la hora de contratar este plan, era precisamente esto.