El juego del calamar ha protagonizado un éxito sin precedentes, convirtiéndose en todo un fenómeno mundial y encaminándose a ser una de las series más vistas de la historia de Netflix. Los macabros juegos son los grandes protagonistas de esta ficción coreana, por ello, os contándoos cuáles son las reglas de cada una de las pruebas que tienen lugar a lo largo de los nueve episodios y los ordenamos de peor a mejor.
¡A luchar!
6. Luz roja, luz verde
En España existen equivalentes como "El escondite inglés" o "Pollito inglés", entre otros (dependiendo de la zona en la que te encuentres). En Corea del Sur optaron por dejar en paz a los ingleses y decidieron hacerlo más sencillo, dejando que una máquina gigante y escalofriante sea la que lleve a cabo el protocolo, sin entonar la irritante canción.
Apoyado en una pared y dándole la espalda a los jugadores, el robot gigante con forma de niña pronuncia "luz verde", dando permiso a las personas para que avancen todo lo que puedan. El objetivo será cruzar la línea de meta y superar a la enorme figura sin ser vistos, pero solo podrán hacerlo cuando ella se lo permita. Pasados unos segundos, la figura dirá "luz roja" y se girará hacia los participantes, que deberán permanecer completamente inmóviles.
El verdadero reto será no mover un músculo cuando ella se gire, porque si las cámaras que tiene por ojos detectan cualquier tipo de movimiento, serán disparados. Este es uno de los cambios que incorpora el juego, en el que originalmente debías volver al punto de partida si te pillaban. En este caso, no habrá segundas oportunidades.
5. La cuerda
"La cuerda" es uno de los juegos más simples que aparecen en la serie, aunque no por ello se trata del más sencillo. En él, los jugadores se dividen en dos equipos y el capitán de cada uno deberá escoger detenidamente a sus compañeros, teniendo en cuenta no solo sus habilidades físicas, sino también las mentales.
Los componentes de cada equipo se sitúan a ambos extremos de una larga cuerda, dividida por la mitad previamente con un pañuelo que indica el punto medio. En el suelo habrá una línea que marcará el centro y el objetivo será tirar de la cuerda con fuerza, obligando al otro equipo a atravesar la línea.
En la serie, la cuerda termina cortándose y el equipo perdedor cae al vacío, pero puede que la mayor dificultad no sea esa, y que en realidad el objetivo sea acabar el juego sin quemarse los dedos de las manos.
4. Canicas
En este caso, nos encontramos ante la fantasía soñada de cualquier tramposo, dispuesto a hacer lo que sea para llevarse la victoria, porque la propia supervivencia queda por encima de la vida de tu contrincante. A cada jugador se le otorga una pequeña bolsa con diez canicas en su interior, y se les abandona a su suerte en un terreno cuidadosamente diseñado para que parezca nuestro barrio de siempre.
Aparentemente, cualquier tipo de estrategia será válida para derribar a tu oponente y hacerte con las otras diez canicas que posee. Por parejas, los participantes compiten entre ellos, algunos retándose a lanzar las canicas lo más lejos posible, otros optando por intentar encajarlas en un agujero que hay en el suelo, y otros jugando a acertar las que esconde en la mano el contrincante.
La estrategia reside en la moral de los jugadores, que deberán decidir si prefieren engañar a su adversario para ganar antes o si por el contrario, harán lo correcto y seguirán sus propias normas.
3. Las galletas de azúcar
El siguiente juego es una de las opciones más deliciosas para los espectadores de la serie. Los jugadores restantes se sitúan en un parque de juegos infantil gigante y deberán escoger una forma geométrica, sin saber cuáles serán las consecuencias que les traerá consigo su decisión. Un paraguas, un cuadrado, un círculo y una estrella, formas geométricas muy simples pero que les terminarán invadiendo la mente y provocando dolorosas jaquecas.
Una vez elegida la figura, los jugadores recibirán una galleta azucarada en la que aparece la forma dibujada, y deberán extraerla con una aguja, teniendo mucho cuidado y haciendo filigranas para que sacarla sin romperla. El problema llega cuando eres como el protagonista, y te decides por el paraguas, la opción más complicada y con más recovecos de todas.
2. El puente de cristal
El puente de cristal se ha convertido en el desafío más injusto de todos y por ende, en el más entretenido si lo observas desde la barrera. Desde el punto de salida, los jugadores observan ante ellos varias casillas, compuestas por dos placas de cristal, una a cada lado. Para poder avanzar y llegar al final del puente, deberán escoger si saltan encima de una u otra.
La dificultad está en que uno de los dos estará hecho de vidrio, y aunque aparentemente puedan parecer iguales, deberán posicionarse sobre el que está hecho de cristal templado. De no ser así, el otro se romperá en mil pedazos y, sin ser capaz de soportar el peso del jugador, dejará que este caiga al vacío.
Un juego de azar en el que deberás contar con toda la suerte del mundo para llegar al otro lado, o ser vidriero y conocer las condiciones y las diferencias entre el aspecto de ambas placas. Si eres del segundo tipo estás de enhorabuena y solo deberás preocuparte por evitar que te empujen.
1. El juego del calamar
Se trata de uno de los juegos más físicos y violentos que se practican en la serie, donde el tablero está compuesto por unas formas geométricas que, desde arriba, componen el aspecto de un calamar. Los participantes vuelven a dividirse en dos equipos como los que atacan y los que defienden. Como bien explica el narrador al principio de la serie "una vez que comienza el juego, la defensa puede correr con dos pies dentro de los límites, mientras que el ataque fuera de las líneas solo puede saltar con un pie".
"Una vez que un atacante atraviesa la figura por la cintura del calamar superando a la defensa, se le da la libertad de usar ambos pies. Para ganar, los atacantes deben golpear con el pie el pequeño espacio cerrado en la cabeza del calamar. Pero si alguien de la defensa consigue empujarte fuera del límite del calamar, mueres".
El narrador se olvidó de contar que la muerte ocurriría en el sentido literal, pero los creadores nos sorprendieron a todos, provocando que lloviese en el terreno de juego justo en ese momento, jugando con la ironía y dejando que los jugadores estuvieran "en su salsa".
'El juego del calamar' está disponible en Netflix.
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