La cocina es tendencia en la ficción audiovisual. Tras los éxitos de series como The Bear o películas como The Menu, la última exponente de este subgénero es Nada, una producción argentina de Disney+, que como los ejemplos anteriores también ha optado por un título genérico.
Pero que eso no os engañe, porque esta propuesta no tiene nada genérica en ninguno de sus apartados. Creada por Mariano Cohn y Gastón Duprat, los responsables de Competencia oficial y El ciudadano ilustre, como en sus trabajos anteriores vuelven a poner el foco en una profesión, en esta ocasión, la crítica gastronómica.
Esta serie, además, tiene el honor de ser la primera a la que Robert De Niro le ha dicho sí. El actor se ha interpretado a sí mismo en pequeños cameos en 30 Rock o Extras, pero hasta ahora no había formado parte del elenco regular de ninguna serie. No parece de entrada la opción más obvia, pero queda claro que tuvo buen instinto. Y si siguiendo sus pasos, el espectador también le da una oportunidad a Nada, pasará un buen rato.
El Anton Ego de Buenos Aires
El crítico gastronómico más conocido de la cultura popular es Anton Ego, el francés estirado y agrio de Ratatotuille, a quien un plato sencillo lo lleva de vuelta a su infancia y le devuelve el placer por la comida que había perdido con los años. Manuel Tamayo (Luis Brandoni), el protagonista de Nada, se le parece mucho.
Manuel es un sibarita y elitista acostumbrado a la buena vida. Lleva décadas sin pagar la cuenta en ningún restaurante, mientras los destroza con su pluma, porque tal como explica "la ofensa se disfruta más por el lector y es más interesante para quien escribe". Continúa teniendo influencia, pero está en horas bajas, viviendo del cuento y de la renta. No ha escrito ni una página del libro por el que la editorial le dio un adelanto, y ya se lo ha gastado, por lo que ha estado vendiendo algunas obras de arte de su colección.
Ese parece ser el mayor de sus problemas, pero su vida se termina de ir al traste cuando se queda sin su asistenta de toda la vida, una mujer que lo conocía mejor que él mismo y que mantenía una libreta con apuntes detallados de todas sus filias, fobias y caprichos. Ahí, en medio de su crisis creativa y con unas neuras que no aguanta ni él, de repente se encuentra aprendiendo a vivir desde cero, porque no sabe usar un móvil, la tarjeta de crédito o conducir. Dependía de su asistenta para todo como un niño caprichoso.
Su existencia se transforma gracias a la aparición de Antonia, una humilde, generosa y paciente joven paraguaya (Majo Cabrera) que consigue el trabajo de asistenta a pulso y poco a poco le recuerda el placer de las cosas sencillas.
Robert De Niro
El oscarizado actor interpreta a Vincent Parisi, una leyenda de la literatura, ganador del Pulitzer y viejo amigo de Manuel, al que ve una vez cada dos décadas. "No vivimos en el mismo país ni hablamos la misma lengua. Pero nos unen dos cosas: somos dos viejos medio bastardos y sentimos placer con la buena comida", dice en su primera escena.
De Niro, o más bien Parisi, cumple el papel de narrador que introduce cada episodio para dar contexto a la historia de su amigo, mientras habla a cámara explicándole detalles de la cultura argentina al espectador, como la diferencia entre "boludo" y "pelotudo". También confiesa que su expresión favorita es "la concha de la lora" y repite con gracia y estilo palabras un tanto complicadas para los angloparlantes como "parrilla" o "chimichurri".
En el quinto episodio, el personaje se une a la fiesta en Buenos Aires y hace muy disfrutable su química con Luis Brandoni, su amigo en la vida real, mientras disfrutan de la ciudad y la gastronomía porteña.
Cuidado, que da hambre
La serie ha contado con la chef Narda Lepes, el chef Francis Mallmann y el periodista especializado en gastronomía Federico Oldenburg como asesores culinarios de la serie, por lo que la comida en pantalla ocupa un lugar especial, revelando cuál es el truco para hacer la mejor milanesa, haciendo salivar al espectador con un trozo de carne argentina que puede cortarse, como si fuera mantequilla, con el mango de una cuchara o evocando la mítica escena de Ratatotuille con un humilde plato paraguayo de sopa.
Se ve entera en dos horas
La serie solo tiene cinco episodios de entre 20 y 25 minutos, por lo que se tarda en verla entera menos tiempo que muchas películas, y como un buen menú degustación deja al espectador satisfecho.
'Nada' está disponible en Disney+.