Hay ocasiones en la industria del audiovisual en las que algunos proyectos no necesitan del apoyo económico de Hollywood para llegar a lo más alto y conquistar al público. El ejemplo más reciente ha sido The Chosen, que financiándose a través del crowdfunding ya acumula cuatro temporadas y se ha convertido en un fenómeno global.
La serie sobre la vida de Jesucristo acaba de volver con su temporada 4 que, a diferencia de las anteriores, prepara el camino lentamente para la tragedia que está a punto de suceder. Sus episodios arrancan con una mezcla de tristeza y algo de melancolía, la despedida de un personaje icónico y la entrega concluye de forma satisfactoria, enumerando otros sucesos que repasamos a continuación.
Así ha sido el regreso de The Chosen, que ha estrenado su cuarta temporada en la aplicación oficial de la serie y en acontra+, y que concluía este viernes su emisión semanal con el estreno del capítulo final de esta tanda.
Un regreso a lo grande
Hay una afirmación sobre The Chosen que sigue siendo una verdad como un templo y que se sigue confirmando temporada a temporada: estamos ante la mejor ficción que se ha hecho sobre la vida y obra de Jesucristo. Desde que se atrevió a pedir el apoyo de la gente para autofinanciarse a través del crowdfunding y hasta los estrenos de sus capítulos en salas de cine que logran congregar a miles de personas en todo el mundo, se trata de una ficción que se supera a sí misma y sigue cautivando a sus espectadores.
Y esta cuarta temporada ha sido una de las mejores de la serie hasta ahora, en parte porque ha demostrado que, aunque el desarrollo de algunos de sus personajes haya sido algo lento, sus conflictos individuales y sus crisis de fe han sido algo que merecía la pena ver. Todo ello combinado con la forma de narrar la evolución de otros personajes secundarios, algo que también ha resultado interesante y satisfactorio.
Aunque los episodios de esta tanda hayan sido especialmente largos, con una media de una hora de duración cada uno, esta entrega ha sido igual de emocionante o incluso más que las anteriores y ha cumplido el difícil propósito de dar cierre a las tramas pertinentes, generando expectación por lo que está por llegar.
Los protagonistas de la temporada
En esta última temporada, ha habido varios protagonistas o personajes que han destacado dentro de la coralidad que siempre ha predominado en la serie. Entre ellos estaba Judas Iscariote (Luke Dimyan), alguien al que hemos visto rebosante de entusiasmo en anteriores ocasiones y que pronto tendrá que tomar una de las decisiones más importantes de esta historia. En esta temporada, hemos visto cómo la luz que desprendía se iba apagando poco a poco.
Por otro lado, han llamado especialmente la atención del público otros personajes como Pilato (Andrew James Allen), Herodes (Paul Ben-Victor), Juana (Amy Bailey) o Claudia (Sarah J. Bartholomew), que sin duda han sido cruciales para establecer una base de lo que ocurrirá en la quinta temporada, donde está previsto que se cuente lo que ocurrió durante la Semana Santa.
En este sentido, The Chosen ha sabido preparar el terreno de lo que vendrá, elaborando un retrato complejo de alguien como Pilato, que será crucial en tramas futuras, sabiendo emocionarnos con lo que ocurre entre Claudia y Juana, introduciendo brevemente a alguien como Caifás (Richard Fancy), o despidiendo a un personaje tan importante en temporadas anteriores como lo ha sido Gaius (Kirk B.R. Woller). Y también nos ha dejado escenas para el recuerdo como las que suelen protagonizar Jesús (Jonathan Roumie) y María (Vanessa Benavente).
Lo mejor de esta entrega
Sin duda alguna, después de haber visto la temporada, es posible que la escena más memorable sea la del enfrentamiento de Jesús con Shmuel (Shaan Sharma) cuando María le lava los pies.
La historia de Shmuel ha sido una de las más impredecibles e intrigantes de la serie. Empezó siendo algo escéptico hacia Jesús, pero pronto se encariñó de él y empezó a seguirle, confiando en que él era el Mesías. Sin embargo, también ha tenido sus idas y venidas, y esto le ha hecho ser uno de los antagonistas más interesantes que hemos visto en The Chosen.
Él ha sido un ejemplo de que la serie avanza a pasos agigantados en cuanto a ser consciente de su valor y calidad, logrando intensificar su narrativa y la emoción que transmite, y siendo capaz incluso de llegar a los espectadores más escépticos o alejados del cristianismo.