Estudiar una carrera universitaria es una de las mejores formas de acceder a una estabilidad económica y laboral. Sin embargo, se trata de una decisión mucho más complicada de lo que parece. De hecho, son muchos los alumnos que dudan de si han escogido bien, si el futuro sueldo será suficiente o incluso si conseguirá trabajo. Y aunque lo más recomendable es elegir los estudios por la vocación, lo cierto es que muchos, e incluso la mayoría, se decantan en función del sueldo y/o la tasa de empleo. Sin embargo, una realidad es que hay un grado que desconocen los jóvenes y registra uno de las mejores tasas de inserción laboral y sueldos que superan los 40.000 euros. En este sentido, estamos hablando de la carrera de Ingeniería Industrial.
Sorprendentemente, según datos de la Seguridad Social, las carreras universitarias que tienen menos tirón entre los jóvenes son las que tienen mejores tasas de empleo, las de Ciencias de la Salud, Arquitectura e ingenierías, con unos índices de empleo por encima del 90%.
No obstante, la oferta de grados de ingeniería en España es muy abundante. Actualmente, existen hasta 60 especialidades diferentes, cada una dirigida a un ámbito en concreto. Y aunque se encuentran entre las carreras más demandas, no todas se pagan igual, ni mucho menos, tienen la misma tasa de ocupación.
En concreto, y como se ha mencionado anteriormente, la carrera universitaria que menos cursan los jóvenes hoy en día y que más demanda hay por parte de la empresas es la de Ingeniería Industrial. Este es, sin lugar a duda, uno de los mejores ejemplos de esos grados 'marginados' por los estudiantes los últimos años.
Un ingeniero industrial es un profesional de la rama de la ingeniería que se encarga de la optimización de los procesos de una empresa. Se trata de un experto multidisciplinario que combina recursos humanos, materiales y sistemas financieros y de administración para aumentar la productividad de una organización. Asimismo, este grado te prepara para analizar, evaluar y ejecutar métodos de producción y proyectos empresariales con mejoras continuas.
El sueldo de estos profesionales ronda los 30.000-35.000 euros anuales. No obstante, a medida que se va adquiriendo experiencia y habilidades, se podrá aspirar a salarios más altos, pudiendo alcanzar los 40.000 euros anuales.
Otros grados olvidados
Lo mismo sucede con el grado de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos, con un 93% de inserción laboral y una tercera parte de los puestos libres; o con el de Telecomunicaciones, que tiene una demanda de graduados por parte de las empresas bastante superior a la media y cuenta con más de medio centenar de vacantes. Además, en ambos casos el sueldo ronda los 30.000-40.000 euros.
Esta baja tasa de alumnos en estas carreras puede deberse a diferentes razones. Por una parte y la más importante, a la falta de conocimiento. Y es que, son muchas las personas que desconocen la existencia de estos estudios, así como los puestos a los que se puede acceder con estas titulaciones. De hecho, muchos asocian estos grados a que tienen menos salidas laborales y por ello, acaban eligiendo otras carreras. Y la segunda, es que hay estudiantes que no se atreven a cursarlos por su gran dificultad.