Francisco Flores, el 'estanquero' en Mojácar y 2 del PSOE que guardaba votos en casa de su primo
Los vecinos afirman que el pucherazo electoral era vox populi: "Iban a pajera abierta, ofreciendo de 150 euros a 250 por el voto, sobre todo a latinos".
25 mayo, 2023 03:12Bartolomé Flores es una leyenda en el PSOE de Almería porque fue alcalde de Mojácar y senador. Este miércoles, pasadas las nueve y media de la noche, estaba sufriendo uno de los peores tragos de su vida: supervisar cómo un cerrajero arreglaba la puerta de la casa de su hijo, Francisco Flores, número 2 de la lista de los socialistas mojaqueros, después de que la Guardia Civil se la hubiese reventado para arrestarle dentro de un operativo por un supuesto fraude electoral.
"¡No vamos a decir nada!", tal y como clamaba Bartolomé, al ser preguntado por EL ESPAÑOL por el nombre del abogado de su hijo, con el objetivo de conocer la versión de su representante legal tras ser arrestado. "Váyase de aquí". Decir que en Mojácar el ambiente está tenso es un eufemismo. Valga como botón de muestra lo que decía la propietaria de un hotelito en el casco antiguo: "Está todo el pueblo 'revolucionao' con el tema de los votos".
Y no es para menos, después de que la temida UCO (Unidad Central Operativa) haya practicado diez registros simultáneos, por una trama de compra de votos, que se ha saldado con siete detenidos, dos de los cuales integran la lista del PSOE a la alcaldía de Mojácar: Francisco Bartolomé (número 2) y Cristóbal Vizcaíno (número 5). El operativo ha tenido de todo: desde reventones de puertas, como lo vivido en la casa del hijo del exsenador, hasta la incautación de una saca con sobres listos para las urnas.
Los dos integrantes de la lista son empresarios, ambos se estrenaban en política y eran los fichajes estrella de la candidatura socialista que lidera Manolo Zamora. "Hechos para ganarse a las grandes familias de Mojácar", tal y como cuenta una fuente de toda solvencia a este periódico. El número 2 del PSOE, Francisco Flores, regenta un céntrico estanco en el que suele trabajar Juana y este miércoles la empleada no estaba dispuesta a atender las preguntas de ningún periodista: "Yo solo soy una trabajadora, Francisco es mi jefe y yo no tengo nada que decir sobre lo que ha pasado. No quiero problemas en el trabajo". Fin de la entrevista.
La detención de Francisco es una mancha en el historial de una familia con peso en lo político y en lo económico, tanto por la trayectoria de Bartolomé que lo llevó al Senado de 1996 al año 2000, donde fue viceportavoz de la Comisión de Defensa, como por los bienes que atesoran en un pueblo que es uno de los motores del turismo de la provincia de Almería.
"Son gente muy influyente: tienen terrenos, el chiringuito Playa Juana, una discoteca alquilada, una inmobiliaria, una administración de lotería en Garrucha y un estanco en Mojácar", según resume una empleada de Loterías y Apuestas del Estado, sobre el patrimonio que tiene esta familia. Tan buena es la situación económica de los Flores que casi nadie entiende que el número 2 del PSOE tuviese la necesidad de embarcarse en la supuesta compra de votos para llegar a la alcaldía.
Pero el caso es que la UCO ha localizado en casa de un sobrino del número 2 del PSOE, Francisco Flores, más de 200 sobres con el voto por correo, apostando masivamente por la candidatura socialista en Mojácar. El primo en cuestión se llama Vicente, trabaja en el afamado chiringuito Playa Juana Beach Club, no forma parte de la lista para las municipales, pero es uno de los siete detenidos por la Guardia Civil.
En el listado de arrestados también hay ciudadanos nacidos en Paraguay, Colombia y Ecuador que supuestamente hacían de gancho para la compra del voto inmigrante de la localidad: el sufragio cotizaba supuestamente desde los 100 hasta los 250 euros. En los registros, los investigadores también han intervenido listas censales en las que estaban marcados los nombres de determinados ciudadanos.
La investigación que se encuentra bajo secreto de sumario no es baladí, ya que el próximo domingo hay llamados a las urnas unos 4.000 vecinos en Mojácar. De todos ellos, aproximadamente el 20% (unos 783 votantes) son extranjeros: en su mayoría, de Reino Unido, seguidos de una gran parte que provienen de países latinoamericanos.
En la casa del exalcalde y exsenador Bartolomé Flores, próxima al Playa Juana Beach Club, los investigadores también pasaron varias horas. Una dura prueba para el honor de un político de rancio abolengo y que lo fue todo en Mojácar, aunque tampoco estuvo exento de alguna polémica.
Prueba de ello fue la recalificación de una finca rústica de un millón de metros cuadrados, en primera línea de playa, en su etapa al frente del Ayuntamiento de Mojácar. Tan solo seis meses después de ser clasificados como urbanizables, los terrenos fueron vendidos por sus propietarios, agrupados en una sociedad liderada por Francisco Alarcón Carmona: el cuñado del entonces regidor Bartolomé Flores. Aquella operación reportó unos beneficios superiores a 1.000 millones de pesetas.
De momento, esta investigación por fraude electoral ha provocado un terremoto en la recta final de la campaña con réplica en Ferraz. La primera decisión de la dirección nacional del partido ha sido expedientar y suspender cautelarmente de militancia a Francisco Flores: número 2 de la lista del PSOE. Al número 5, Cristóbal Vizcaíno, no han podido suspenderlo de militancia porque no es afiliado. Este empresario que regenta un conocido bar de copas llegó como independiente a la lista que encabeza Manuel Zamora: Manolo, como le llaman en Mojácar.
Desde el PSOE local desligan al candidato de este supuesto fraude electoral, centrado en el voto inmigrante de la localidad: "Manolo no ha tenido nada que ver. Ponemos la mano en el fuego por él". Pero a cuatro días de las elecciones, hay fuegos que son difíciles de apagar, sobre todo cuando los vecinos consultados por EL ESPAÑOL aseguran que la trama era un secreto a voces. "Iban a pajera abierta: ofreciendo de 150 euros a 250 por el voto", tal y como asegura desde el anonimato un señor jubilado.
"Buscaban sobre todo a latinos, incluso le habían ofrecido a alguna familia pagarles un mes del alquiler del piso por sus votos". Lo mismo cuenta un joven que como todos los parroquianos solo accede a hablar desde el anonimato: no quiere represalias. "En el pueblo se sabía que buscaban a la gente más necesitada de dinero", resume el chaval. El runrún de pucherazo se ha transformado en un operativo de la Guardia Civil que ha sacudido los cimientos de la sede local del PSOE: cerrada a cal y canto. Por allí no pasa ni un militante, solo alguna televisión para grabar un plano de la fachada.
El panorama en la sede del PP es diametralmente opuesto: es un búnker. Están todos dentro, reunidos, con la actual alcaldesa a la cabeza, Rosa María Cano, pero nadie sale a la calle a dar declaraciones o a hacer una valoración sobre una investigación que puede haber hundido al PSOE en las urnas el 28 de mayo.
"El próximo domingo hay que subir a votar y mira la que se ha 'armao'", resume una lotera. En cada rincón del pueblo, el tema de conversación es el mismo: las detenciones del número 2 y el número 5 que se presentaban como un revulsivo para el pueblo.
Francisco Flores (2): "Mojaquero y empresario. Apasionado de Mojácar, me comprometo a crear viviendas para nuestros jóvenes, trabajar de forma decidida para prolongar la temporada turística y posicionar a Mojácar en el lugar que se merece". Cristóbal Vizcaíno (5): "Licenciado en Ciencias del Deporte. Hostelero. Pondré mi empeño en trabajar por un Mojácar del que se sientan orgullosas generaciones presentes y futuras".
Ni el 2 ni el 5 del PSOE podrán cumplir ya ninguna de estas promesas. Los únicos que no hablan del pucherazo electoral son los turistas, como un grupo de alemanes, bien cargado de cerveza, que se hace una foto con El Índalo: el conocido 'muñeco mojaquero'. En la zona de playa el guion se repite, una empleada brasileña de un gimnasio cuenta lo mismo que en el casco histórico: "Estaba pasando algo con los votos de los extranjeros".
En otra punta del pueblo, un operario de grúa colombiano afirma lo mismo aportando cifras concretas: "Un marroquí que lleva un taller clandestino de coches me preguntó a quién iba a votar y como soy colombiano me dijo que estaban pagando por el pueblo 200 euros por el voto".
EL ESPAÑOL ha podido saber que la investigación arrancó hace dos semanas, a raíz de una denuncia de una persona de origen iberoamericano a la que supuestamente le ofrecieron comprarle el voto, pero se negó y acabó tirando de la manta.
A partir de ese momento, se vino abajo la 'operación pucherazo' en la que supuestamente están implicados el número 2 y el número 5 de la lista del PSOE de Mojácar, así como otros militantes que presuntamente ejercían labores de control en la oficina de Correos, llegando a realizar turnos de sustitución. Al igual que en Melilla, la red incluiría la actuación de intermediarios, encargados de conseguir la compra de votos por correo para los partidos políticos interesados.
Este miércoles, la candidatura socialista convocó una reunión en la casa de uno de los integrantes de la lista para estudiar qué hacer en lo que queda de campaña. "Nos han dicho en el grupo de WhatsApp que no hablemos hasta que no celebremos la reunión", tal y como confesaba un miembro de la lista del PSOE, con la condición de no revelar su identidad. "Yo no soy afiliado, me invitaron a la lista para hacerme sentir parte de la comunidad. Yo tengo la conciencia tranquila porque solo he ido a 3 o 4 reuniones".