Pepe Zapata (Málaga, 1969) está desbordado en la tarde de este martes. No lo esperaba, pero así ha sido. No para de atender al teléfono por culpa de Felipe VI, cosa que tampoco podía predecir. El Rey acudió a Cádiz a la inauguración del IX Congreso Internacional de la Lengua Española, que se celebra del 27 al 30 de marzo, y acabó por hacerse viral tocando uno de los cajones colocados por Pepe.
A la llegada del monarca había una cajoneada pública y alguien gritó: "Nos quedan dos asientos libres". La Reina Letizia se sentó en uno de los cajones primero; luego llegó, de manera casi tímida, Felipe VI, que no se quedó de brazos cruzados y empezó a tocar como uno más, demostrando que una cosa es el tiempo y otra cosa es el compás. "Tenemos el primer rey cajero" o "somos cajeros reales", se oía gritar a alguien tras levantarse Felipe VI.
El cajón donde tocó el rey es uno de los que Pepe Zapata transporta a sus exposiciones con Cajón Expo. "Está saliendo poco, pero esto también es gracias a la colaboración con el Instituto Cervantes, que ha permitido que se dé en Cádiz un hermanamiento con Perú", insiste este fotógrafo malagueño.
Felipe VI
Su exposición dejó al descubierto una de las pasiones del Rey: tocar el cajón.
"Sabíamos que iban a ir a la inauguración, pero no que se iba a sentar", expone Zapata, que lleva años inmiscuido en el mundo del flamenco. Fue una grata sorpresa ver al Rey, "que se ve que no es la primera vez que rasca un cajón". "Siempre es un lujo verle en el cajón", dice Zapata: "Se nota que tenía nociones musicales".
La destreza del Rey hizo pensar a muchos que estaba preparado. Nada más lejos de la realidad. Tal y como ha contado este periódico, Felipe VI "tiene dos (cajones) en casa y cuando tiene tiempo, que es casi nunca, busca un hueco para practicar y relajarse con ello. Es autodidacta, pero se ve muchos vídeos por Internet y las cosas le van saliendo", según una persona cercana al Rey.
Actualmente, a Zapata se le han agotado todos los cajones que tenían a la venta en promoción. Asegura, en conversación con EL ESPAÑOL, que pronto habrá más, aunque declina decir cuánto cuesta un cajón similar al que tocó el Felipe VI. Prefiere que se hable de los artesanos que conforman la asociación CajonAn, que se dedican a la elaboración de estos instrumentos en Andalucía.
Su historia no está enfocada en la venta de cajones, sino en la divulgación instrumental, de ahí que la venta sea utilizada para financiar sus proyectos y exposiciones. Los cajones de la cajoneada no se venden, sino que se ponen a disposición del público otros que llevan de promoción en los 'show'.
Cajón Expo
La historia de Cajón Expo está ligada a este fotógrafo y realizador malagueño, actualmente afincado en Granada, que lleva toda una vida dedicada al mundo de la producción audiovisual y el flamenco. Tal y como explican en su página web: "Play it again S.L. es una empresa dedicada a la producción audiovisual, creación de contenidos multimedia, gestión cultural y programación de eventos" en la industria cultural.
En el Parque de las Ciencias de Granada se afinca este proyecto personal de Zapata. Se trata de una exposición temática "sobre la evolución del cajón, instrumento que en la actualidad es fundamental dentro de las músicas modernas".
Felipe VI tocando el cajón
A pesar de la gran acogida que ha tenido, sobre todo en el flamenco, este instrumento es originario de Perú y fue introducido por Paco de Lucía en el arte jondo. Tal y como explican en la web de Cajón Expo, "tiene su origen en las antiguas cajas de mercancías y de alimentación transportadas en los barcos que salían de Sevilla destino a América en siglo XVI. Estas cajas fueron recicladas y convertidas en humildes instrumentos de percusión".
En los últimos tiempos, Guitar Fab-Lab, la otra pata del proyecto de Zapata, se ha dedicado "a coleccionar y construir copias de cajones históricos como los del etnomusicólogo cubano don Fernando Ortiz o el famoso cajón de Monserrate, cajonero peruano que colocó este instrumento en el más alto nivel de innovación e interpretación dentro de la música afroperuana de su época".
Los objetivos
Señala Zapata que sus investigaciones en el mundo del flamenco le llevaron hace diez años a hacer documentales. A partir de ahí, comenzaron a trabajar con la guitarra y luego con el cajón. "Lo que pretendemos es hacer un timeline con el ritmo. Las tres líneas son investigación, una línea divulgativa y un fenómeno peruano".
"No somos show business. Nos interesa la divulgación y estar unidos por un estrecho hilo", dice Zapata. Este tipo de eventos se suelen llevar a cabo en Granada muchos días de la semana para escolares.
Entre los objetivos de Cajón Expo se encuentran: Taller de construcción de cajones flamencos ecológicos; cajoneadas con músicos y público participativo; conciertos didácticos de la evolución del cajón; exposición sobre la historia y evolución del cajón; y un espacio dedicado a constructores andaluces de cajón flamenco.
El equipo de Cajón Expo sobre los cajones.
Este tipo de cajoneadas, como la realizada en Cádiz, son típicas de Perú y es raro verlas en España. De hecho, Zapata apunta que ellos realizan el único festival de cajón fuera de Perú del mundo todos los años. "Es casi mágico", señala. En él se congregan hasta 70 cajones donde tocan músicos y personas que no han tenido contacto previo. "Aquí se quedaron dos huecos libres porque es difícil que te duelan las manos después de 20 minutos tocando", apunta.
Esos dos huecos los coparon los reyes de España. Claro está que a Felipe VI no le dolerían las manos, a pesar de que su intervención fue tímida, en Cádiz. El Rey parece acostumbrado a rascar el cajón a través de diferentes ritmos en Zarzuela.