En octubre de 2016, un joven concursante malagueño entró por la puerta grande en los libros de historia de ‘Pasapalabra’. David Leo consiguió, en su programa 109 en el concurso, que por aquel entonces emitía Telecinco y estaba presentado por Christian Gálvez, llevarse el bote con casi dos millones de euros (1.866.000€), más alto que se entregó durante toda la trayectoria del programa en Mediaset.
El también poeta y escritor es el segundo concursante que más dinero se ha llevado en ‘Pasapalabra’, solamente superado por Eduardo Benito (2.190.000 € en 2006, que sigue teniendo el récord del premio más alto entregado en el concurso en todas sus etapas) y, completando el pódium, con 38.000 euros menos que el malagueño, está Pablo Díaz (1.828.000 €), que lo ganó en julio de 2021 en Antena 3.
EL ESPAÑOL ha contactado con Leo para recordar su paso por el espacio del Telecinco, en qué invirtió el dinero que consiguió, su participación en otros concursos y para comentar su actual labor ‘El Cazador’ de TVE, donde tiene un papel de ‘anti-concursante’.
Misma vida
Han pasado 16 años desde su participación en ‘Pasapalabra’, pero los recuerdos de su paso por el espacio de Telecinco siguen estando muy presentes en la vida de David Leo, tanto por el colchón económico que logró como porque le descubrió un mundo al que dedicarse profesionalmente, el de los concursos de televisión.
Además de llevarse casi dos millones de euros, Leo dejó otro récord que todavía no ha sido superado, el de mejor balance de victorias, empates y derrotas de un concursante en ‘Pasapalabra’.
- ¿Cómo le cambió la vida ganar el bote del concurso?
- Seguí haciendo una vida muy parecida, pero con bastante más tranquilidad, lógicamente. No siento ansiedad por el futuro y menos ahora que tengo un trabajo que es estable en ‘El Cazador’ de TVE.
- ¿En qué invirtió el dinero del premio?
- Nunca he sido una persona de muchos gastos, ni me gustan los lujos, pero sí que he podido comprarme una casa, que eso es un alivio, y algún viajecito me he pegado (risas).
- ¿Se quedó mucho Hacienda?
- Sí, pagué a Hacienda aproximadamente la mitad del premio y, la verdad, es que lo hice con mucho gusto.
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- Dicen que es el mejor concursante de la historia de ‘Pasapalabra’ con 103 victorias, cinco empates y solo una derrota. ¿Qué opina de ello?
- Pienso que pasa un poco como en el ajedrez, que los últimos campeones suelen ser los mejores, pero porque cuentan con la experiencia de los anteriores y, en el caso de los concursantes, porque tienen muchos más programas por ver.
- ¿Por qué decidió presentarse al concurso?
- En 2013 acababa de salir de ‘Saber y Ganar’ y estaba bastante contento con mi participación, pero también con un poco de síndrome de abstinencia de concursos. Como no tenía un trabajo estable ni una fuente de ingresos fija, centré todas mis energías en conseguir ganar en ‘Pasapalabra’.
- ¿Cuántas horas de estudio le dedicaba a la formación para contestar las preguntas de El Rosco?
- Según la época un poco más o menos, pero de media diría que unas cuatro horas diarias (Pablo Díaz le contó a EL ESPAÑOL que dedicaba hasta nueve horas). Estudiaba entre el desayuno y la hora de preparar la comida. Luego, mientras estaba concursando, le dedicaba mucho más tiempo, estaba completamente obsesionado, también es lógico porque una hora más o menos de estudio podía suponer ganar o perder.
El cambio de cadena
El 1 de octubre de 2019, tras la disputa por los derechos de emisión del concurso contra ITV Global Entertainment, el Tribunal Supremo ordenó a Telecinco parar la emisión del programa. Tras recibir la sentencia, Mediaset comunicó públicamente que esta sería acatada de forma inmediata y que ese mismo día se emitiría su último programa, siendo sustituido por otro concurso, ‘El tirón’, también con Christian Gálvez al frente.
El programa mantuvo a sus concursantes míticos como Orestes Barbero o Rafa Castaño (que actualmente se están enfrentando en ‘Pasapalabra’ en Antena 3), y recuperó a otros históricos, como el propio David Leo.
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- ¿Cómo vivió el final de ‘Pasapalabra’ en Telecinco?
- Lo viví como creo que todo el mundo, como el final de una era, también por lo que tenía de simbólico. Aparte yo no estaba pasando un buen momento personal así que fue un ingrediente más para mi crisis.
- ¿Ha hablado con Orestes y Rafa sobre cómo llevan su actual participación?
- He hablado sobre todo con Rafa que somos muy amigos. Nos conocimos en ‘Saber y Ganar’, yo en esos momentos vivía en Barcelona, él venía mucho a verme y yo también iba a Sevilla, donde vive él. Luego coincidimos en ‘El Tirón’ de Telecinco, que fue el programa que montaron después del final del ‘Pasapalabra’. Estuvimos cuarenta y tantas entregas juntos con los desayunos y cenas que eso lleva aparejado. Hablar con Rafa, o con el concursante que esté activo, es vivirlo de nuevo, te recuerda la emoción que suponía participar.
Su nueva vida
“David Leo vive de los concursos, creo que es el único en España, y le va bastante bien. Eso sí, es un caso excepcional”, comentó a este periódico Manolo Romero, ganador del bote de ‘Pasapalabra’ en 2004.
Y es que en la actualidad, Leo, como comentaba el librero e historiador, sigue vinculado al mundo de la televisión ganándose la vida en el concurso de RTVE, ‘El Cazador’, junto a Erundino Alonso (de Los Lobos de ‘¡Boom!’), Paz Herrera, Ruth de Andrés y Lilt Manukyan.
- ¿Cuál es su labor en ‘El Cazador’?
- Mi labor, según figura en mi contrato, es la de artista invitado. Realmente soy el anti-concursante, como bien dice Erundino. Somos los malos de la película, los que impiden o intentan impedir a los concursantes que se lleven el premio.
- ¿Qué tal con Erundino, que también logró un gran bote en ‘¡Boom!’, y con el resto de sus compañeros cazadores?
- Pues muy bien claro, ¿qué voy a decir? (risas). Hemos tenido la oportunidad de coincidir en varios programas especiales y ahora en ‘La noche de los cazadores’, que acabamos de grabar la segunda temporada. Formamos un equipo muy variado y muy coqueto.
- Si no estuviera en ‘El Cazador’, ¿participaría en otro concurso tipo ‘¿Quién quiere ser millonario’, ‘¡Boom!’ o ‘La ruleta de la suerte’?
- Seguramente sí, llevo el veneno de los concursos dentro de mi desde los 18 años, o incluso antes, y es difícil encontrar el antídoto, así que definitivamente sí, probaría todos los concursos. A ‘¿Quién quiere ser millonario?’ le tenía en concreto especiales ganas porque lo veía en casa desde que era pequeño. De hecho, mi cuñada me decía siempre que yo iba a ser el primero en llevarme los 50 millones de pesetas del premio, pero cancelaron el concurso antes de que yo cumpliera la mayoría de edad, así que hubo una imposibilidad cronológica.
- Manolo Romero nos comentó que es la única persona que conoce que se dedica a los concursos de forma ‘profesional’. ¿Se puede vivir de este tipo de programas?
- En estos momentos, técnicamente los cinco cazadores de ‘El Cazador’ vivimos de los concursos. Es diferente porque nosotros ahora tenemos un sueldo fijo, si se pretende vivir únicamente de los premios es más complicado, depende mucho de la destreza y de la suerte que tenga cada uno, lógicamente. Te puedes llevar un bote de ‘Pasapalabra’ que sea de 18.000 euros, que está muy bien, pero no te apaña la vida, o uno más cuantioso como puede ser el mío, el de Paz (se llevó el 27 de mayo de 2014 1.310.000 euros en Telecinco), el de Juan Pedro (el 18 de julio de 2013 logró 1.674.000 euros también en la época de Telecinco) o el de Pablo Díaz.
Masterchef
No hay concurso que se le resista al malagueño y como entre sus aficiones está la cocina, reconoce que le gustaría participar en MasterChef, eso sí, “sin intención de envenenar a nadie. Me gusta mucho cocinar, es algo que me relaja”.
Los juegos de mesa y de cartas también son otras de sus aficiones, como el ajedrez, deporte que practicó mucho de niño y que desde 2013 ha vuelto a retomar. “Me ha gustado siempre mucho jugar, como a todos los niños, claro, pero no todos los adultos siguen manteniendo ese gusto por el juego, yo sí”, señala.
Pero si se tuviera que decantar por sus aficiones preferidas, lo tiene claro: “La pasión de mi vida es la poesía, es lo que me ha lanzado a la calle, la actividad que he mantenido más permanentemente. El cine también es otra de mis pasiones. He tenido la suerte de estudiarlo y practicarlo, haciendo críticas, guiones, dirección e incluso rodar un corto. A día de hoy, como espectador, también lo disfruto mucho”, afirma Leo.
- Logró el premio Hiperion con 17 años: ¿Qué recuerda de aquello?
- Recuerdo muchas cosas y todas maravillosas. Ese premio me sacó a la calle, me llevó por muchas ciudades de España. De hecho, ahora mismo estoy en Albacete en un festival de poesía, todo esto sin el premio y el rodaje que vino tras él no habría sido posible. El galardón me cambió la vida en muchos aspectos, gracias a él conseguí una beca de la Fundación Antonio Gala, conocí a muchos compañeros y amigos, me fui con ellos a vivir a Madrid… un montón de aventuras vitales me han llegado a consecuencia de haber ganado ese premio.
- ¿Cuántas publicaciones ha escrito?
- Hasta el momento libros como tales he publicado tres: Urbi et Orbi (2006), Dime qué (2011) y Nueve meses sin lenguaje (2018).
- ¿Cuáles son sus próximos proyectos?
- Además de trabajar en ‘El Cazador’, continuar escribiendo y seguir haciendo mis tareas cotidianas, me he enfrascado en el estudio de la carrera de Psicología. Estoy en primero y, la verdad, es que me está gustando mucho, es muy exigente la carrera, pero quizá es por eso por lo que me está llenando tanto.