Entre el crepúsculo y el amanecer, existe un instante mágico que se produce cada día mientras el sol intenta alcanzar la fina línea del horizonte. Aunque más que un instante, hablamos de alrededor de ocho minutos de enorme calma y belleza: el tiempo exacto que tardan los primeros rayos de luz en posicionarse en el límite del paisaje viajando a una velocidad de 300.000 kilómetros por segundo. Sin duda, un auténtico espectáculo visual que la gran mayoría de la gente se pierde porque, cuando tiene lugar este evento, muchos se encuentran todavía en la cama. 

La verdad es que, por lo general, siempre estamos poniendo el foco en el encanto de los atardeceres de Galicia, pero en esta ocasión queremos centrar nuestro interés en la salida del astro rey y determinar cuáles son los mejores rincones para disfrutar de la magia de este acontecimiento que marca el comienzo del día de millones de personas alrededor de todo el mundo. Si bien es cierto que cualquier lugar es susceptible de convertirse en la perspectiva perfecta para observar los primeros rayos de sol y la curiosa gama cromática de colores que se va formando en el horizonte, nosotros hemos querido seleccionar 10 escenarios distintos, que por los elementos que los rodean, presumen de una belleza y magia inherente a este preciso momento de la jornada. 

Playa das Catedrais (Ribadeo)

Hay paisajes que son un espectáculo natural en sí mismo. Y en el caso particular de Galicia, la playa das Catedrais en Ribadeo es, sin lugar a dudas, uno de esos rincones mágicos. No es de extrañar por tanto que este emblemático arenal de la Mariña lucense se encuentre mencionado en todos los rankings de "los mejores amaneceres de España". La verdad es que las curiosas formaciones rocosas que se extienden por toda la playa formando a su paso todo tipo de arcos, pasadizos y cavidades realmente únicas e imponentes, conforman el elemento perfecto para que se produzca el hechizo visual cada vez que el sol sale en busca del horizonte. Los primeros rayos de luz del día atraviesan entonces estos espacios rocosos mientras el ambiente se tiñe de tonos pastel y los golpes del mar emiten la mejor banda sonora.

Ermida Virxe do Porto (Valdoviño)

En el corazón de las Rías Altas, muy cerca de uno de los faros más modernos de Galicia y a orillas de la playa de A Frouxeira se enmarca la curiosa capilla da Virxe do Porto. Este llamativo templo de la parroquia de Meirás (Valdoviño) se enclava sobre un pequeño peñasco rocoso al cual solo se puede acceder a pie cuando la marea está más baja. Se trata de un enclave con un encanto único, un lugar recóndito donde el mar golpea con fuerza contra las rocas en los inviernos más duros y en el que el sosiego llama a la puerta del templo en los días de mayor calma. En ambos casos, cuando los primeros rayos de sol alcanzan este paisaje salvaje, la luz incide sobre la silueta de la Ermida da Virxe do Porto convirtiendo el lugar en un auténtico escenario de cuento. 

Torre de Hércules (A Coruña) 

Da igual si hablamos del amanecer o del ocaso: la silueta de la Torre de Hércules envuelta por los rayos de sol es posiblemente una de las imágenes más emblemáticas y fotografiadas de toda Galicia. El famoso faro coruñés se despierta cada mañana con la luz del sol mirándole de frente, creando un extraordinario escenario a contraluz que puede ser disfrutado desde diferentes puntos de la ciudad herculina. Desde el paseo marítimo a los propios pies de la Torre de Hércules, cualquier rincón encuentra la magia cuando el contorno del faro gana presencia sobre un cielo y mar coloreados por esos primeros rayos del día.  

Cabo Finisterre 

El conocido como fin del mundo en Galicia (del latín, finis terrae) no podía faltar en esta lista de escenarios clave a la hora de disfrutar del amanecer en el territorio gallego. El Cabo Finisterre forma una espectacular península rocosa de granito ubicada en plena Costa da Morte, un lugar salvaje que contrasta a la perfección con la quietud que emanan los primeros rayos de sol del día. Si bien durante los atardeceres en este rincón de la provincia de A Coruña es mucho más habitual encontrar la zona repleta de gente, la experiencia de ver el sol perfilándose en el horizonte de Finisterre suele convertirse casi siempre en uno de esos momentos para encontrar la magia y la belleza en la soledad. 

Catedral de Santiago de Compostela

Dejando un poco de lado el litoral gallego, el interior de la provincia de A Coruña también alberga en sus límites rincones repletos de encanto a la hora de disfrutar del amanecer. Uno de los escenarios más mágicos de todos cuantos existen se encuentra en la propia capital de Galicia: Santiago de Compostela y su emblemática catedral conforman el skyline perfecto para disfrutar de los primeros y últimos momentos del día. Al igual que sucedía con la Torre de Hércules, la Catedral de Santiago perfila su majestuosa silueta al compás de los primeros rayos de sol, generando un contraste extraordinario con las luces y colores que se tiñen sobre el cielo compostelano. 

Torre de San Sadurniño (Cambados)

El pueblo más mágico de España este 2024 también esconde uno de los mejores escenarios gallegos para disfrutar del espectáculo visual que se produce entre el crepúsculo y el amanecer. San Tomé do Mar es uno de los barrios marineros más pintorescos de Cambados y es entre precisamente en este burgo donde se encuentra la famosa Torre de San Sadurniño, uno de los monumentos más emblemáticos de la localidad. Las ruinas de esta pequeña fortaleza del siglo X se enclavan en el pequeño islote de A Figueira, al cual se puede acceder a través de un precioso puente de piedra de unos 170 metros de largo. La panorámica desde este punto resulta realmente extraordinaria en cualquier momento del día y época del año, pero más si cabe cuando los primeros rayos de luz inciden sobre los restos de esta antigua torre creada para la defensa marítima de la villa. 

La villa marinera de Combarro

El pueblo donde los hórreos se inclinan ante el mar está considerado uno de los rincones más bonitos de Galicia. No es de extrañar por tanto, que los paisajes de Combarro (Pontevedra) sean a su vez el escenario perfecto para disfrutar de ese espectáculo visual y natural que se produce cada amanecer. Cuando el sol empieza a aparecer en el horizonte de este rincón de las Rías Baixas, el ambiente se tiñe de una luz y unos colores cálidos que convierten al lugar en un verdadero escenario de ensueño, con las barcas tradicionales reposadas sobre la arena o el mar y los bonitos hórreos de piedra contemplando ese preciso instante que marca el inicio de la jornada.  

Ría de Vigo y ensenada de San Simón

Desde las alturas del Monte do Castro o el mirador de Cedeira hasta el entorno del muelle vigués, el paseo de Bouzas o los arenales que rodean a la ensenada de San Simón, cualquier punto que rodea a la ría de Vigo se convierte en las primeras horas del día en un verdadero escenario de película. Mientras los primeros rayos de sol se abren paso en el grueso del paisaje, el cielo y el mar de este rincón de las Rías Baixas se van pintando lentamente de unos colores espectaculares. Desde alguna de las perspectivas, el puente de Rande o incluso las islas Cíes se vuelven más extraordinarias si cabe en mitad de este horizonte mañanero.  

Ribeira Sacra

En el interior de Galicia, entre las provincias de Lugo y Ourense, la Ribeira Sacra no podía faltar en esta selección de escenarios de película para disfrutar del amanecer. Los extraordinarios paisajes que se extienden a orillas de los cañones de los ríos Miño y Sil son más que suficientes para convertir este destino en uno de los más completos y visitados de Galicia. En este punto, las primeras luces del día adquieren una belleza muy particular sobre los bancales, viñedos, miradores y antiguos monasterios que recorren esta joya de la corona del interior gallego. Cabe destacar asimismo que la Ribeira Sacra es posible volar en globo a primera hora de la mañana para disfrutar del amanecer desde las alturas. De hecho, el destino fue elegido entre los mejores lugares de España para disfrutar de este tipo de actividades aéreas. 

Serra dos Ancares (Lugo)

Los techos de Galicia conforman una de las postales más especiales y diferentes para vivir en primera persona el espectáculo visual de los primeros rayos de luz del día en las zonas más altas del territorio. Cabe señalar que los puntos más elevados de la comunidad se extienden, principalmente, por las provincias de Lugo y Ourense, siendo A Serra do Eixo y Os Ancares las zonas con las cumbres más destacadas. Es precisamente en esta última región donde recomendamos disfrutar, siempre que sea posible, de la salida del sol, pues la belleza de rincones como el Pico Mustallar o Peñalonga se vuelve infinita al teñirse con los bonitos colores que se van formando entre el crepúsculo y el amanecer.