Con sus cerca de 1.500 kilómetros de costa, Galicia es una de las regiones de España que más puede presumir de su riqueza natural y paisajística en forma de pequeños y grandes arenales paradisíacos. Eso sí, el litoral gallego también conforma una de las áreas con la temperatura del mar más fría de todo el país en meses como julio y agosto, debido en gran medida a su ubicación en el Atlántico. Con todo, es imposible resaltar que este 2023 hemos vivido uno de los veranos más atípicos de la historia reciente de Galicia y que, entre las anomalías meteorológicas registradas, las altas temperaturas del agua son una de las más llamativas.
Por regla general el litoral gallego mantiene sus aguas en torno a los 16 grados de media. Sin embargo, este verano los efectos de un océano Atlántico extremadamente cálido se han notado incluso en zonas como las Rías Baixas. En este punto del sur de Galicia se localizan las aguas más frías de toda la comunidad, si bien esta temporada estival se han llegado a superar los 20 grados de las mismas en varias ocasiones. Entonces, ¿dónde se encuentran las aguas más cálidas de la costa gallega? A pesar de la estampa feroz pintada sobre las Rías Altas, es en la zona de la Mariña lucense donde se concentran las playas con la mayor temperatura del agua de toda Galicia.
El mediterráneo gallego está en Lugo
La latitud, la distancia respecto al ecuador o la época del año que determina la presencia de corrientes oceánicas son sólo algunos de los factores decisivos a la hora de hablar de la temperatura del agua. En ese sentido, la vertiente atlántica gallega destaca por la gelidez de sus aguas mientras que en la cara opuesta, la costa norte de Lugo esconde algunas de las playas con la temperatura del mar más caliente o suave del verano. Y la tendencia continúa al alza. Sin ir más lejos, hace sólo dos años la boya de Estaca de Bares registró alrededor de 20ºC en el lugar a principios de verano, una temperatura muy suave para lo que es esta zona del norte gallego. Lo curioso de estos datos, frente a otros constatados en la costa de Lugo, es que el mes de julio suele ―o solía― rondar una temperatura de unos 18,9 grados en Estaca de Bares, según la climatología y los registros de las últimas dos décadas.
A pesar de estos múltiples factores y las anomalías registradas durante los últimos veranos, el litoral gallego no puede compararse todavía con las temperaturas alcanzadas en diferentes puntos del Mediterráneo en los que el agua suele rondar en estas mismas fechas los 26 o 28 grados. Aún así, podemos encontrar varios arenales en el norte gallego donde sus visitantes pueden disfrutar de un baño en entornos mucho más suaves que en el resto de Galicia. Playas como las de O Torno (Cervo), Cubelas (Cervo), Xilloi (O Vicedo), As Catedrais (Ribadeo), A Rapadoira (Foz), Esteiro (Xove) y Lóngora (Barreiros) son sólo algunas de las más repetidas en este tipo de rankings que hablan sobre las aguas más cálidas de Galicia.
El agua más cálida de 2023 en Galicia
En el caso particular del verano de 2023, la playa con el agua más cálida de Galicia se registró en el margen derecho de la ría de Viveiro. Según un informe emitido por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la playa de Area alcanzó los 20 grados de media durante este pasado mes de junio. Situada en las cercanías de ladera del Monte Faro y frente a un islote que lleva su mismo nombre, este arenal lucense destaca por su enorme belleza natural y paisajística así como por sus aguas templadas. Se trata de una playa de arena fina, con un mar turquesa y cristalino que apenas presenta fuertes oleajes y que la convierten en un auténtico paraíso playero capaz de atraer cada verano a miles de visitantes hasta su costa.
Pero más allá de la playa de Area, lo cierto es que localidades de la Mariña lucense como Viveiro, O Vicedo e incluso Xove suelen ser por su ubicación privilegiada las que presentan las playas más recogidas y con las temperaturas del mar más suaves. Además de esta preciada cualidad de sus aguas, la tranquilidad y ausencia de grandes aglomeraciones (por lo general), la amplitud de sus arenales y la combinación de increíbles paisajes de mar y montaña convierten a estos enclaves lucenses en destinos turísticos de gran relevancia en el norte de Galicia.