El descenso del caudal del Miño saca a la luz los tesoros ocultos de la Ribeira Sacra
Este fenómeno temporal provocado por un descenso controlado del nivel del agua podrá disfrutarse hasta mediados de noviembre, con rutas fluviales y experiencias gastronómicas puestas en marcha por Turismo Pantón y el restaurante de la Playa Fluvial de A Cova
29 octubre, 2022 06:00España al completo está viviendo una sequía histórica. En los últimos meses, las altas temperaturas y la escasez de precipitaciones han provocado la disminución del caudal de muchos ríos y que los embalses se encuentren muy por debajo de sus capacidades. En el caso concreto de Galicia, según señalan los expertos de la Xunta y la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, esta situación podría no revertirse hasta finales de año. De hecho, la sequía prolongada está sacando a la luz pedacitos de la historia en muchos puntos de la región, tal y como sucede en Chantada (Lugo), donde estos días es posible acceder caminando a Castro Candaz, oculto habitualmente bajo el agua del embalse de Belesar.
Algo similar está ocurriendo en el entorno de la presa de Os Peares, aunque el origen en este caso se debe a un descenso controlado por trabajos de mantenimiento del embalse. "Esta bajada del nivel del agua ha traído a la luz una estampa del río Miño que en muy pocas ocasiones se ha podido contemplar", apunta Pablo Lomba, responsable de comunicación, sobre este fenómeno temporal que podrá disfrutarse hasta mediados de noviembre. Pueblos sumergidos, bancales y antiguas construcciones asociadas a la vendimia heroica o embarcaciones tradicionales que eran utilizadas para cruzar el río, entre otros elementos, forman parte de esos tesoros ocultos que confeccionan el espectacular, insólito y actual paisaje de la Ribeira Sacra. Una buena forma de disfrutar del encanto de estas nuevas panorámicas a orillas del Miño es a través de las rutas fluviales ―con acceso permitido para mascotas―, experiencias gastronómicas y actividades de ocio acuático puestas en marcha durante todo el año por la empresa de Turismo Activo Pantón y el restaurante de la Playa fluvial de A Cova.
Rutas fluviales para descubrir la Ribeira Sacra
Entre los límites de Lugo y Ourense, la Ribeira Sacra conforma una de las zonas más espectaculares de Galicia así como uno de los destinos más completos para visitar en cualquier época del año. Este fenómeno temporal que provoca el descenso en el caudal del Miño da un valor añadido a la extensa oferta de ocio, naturaleza y gastronomía que recorre ambas riberas del río. Juan Millara es el capitán de las embarcaciones de Turismo Pantón que realizan rutas fluviales a diario por la Ribeira Sacra, y según confiesa, "una fluctuación así hace años que no se recuerda, con paisajes que realmente no habíamos visto nunca". Y es que bajo condiciones normales, la capacidad del embalse de Os Peares no suele descender más allá del 85%, mientras que en estos momentos se encuentra ya en un 74%.
En palabras del propio Miralla, el paisaje que puede verse estos días en la Ribeira Sacra está siendo impresionante: "Tenemos un total de 32 pueblos hundidos. Hablamos de pueblos como Chouzán, Pincelo, A Veiga o el propio Belesar… la mayoría tienen la mitad del pueblo asolagado". Aunque la perspectiva de resulta muy diferente a la habitual, las rutas fluviales confeccionadas por la empresa de turismo activo mantienen sus recorridos y permiten observar desde dentro los cambios más significativos a lo largo del Miño en puntos como el entorno del puente de Belesar, la Isla de Maiorga o la Fervenza de Agua Caída, entre otros.
"Básicamente hacemos el mismo itinerario, salimos de la playa fluvial da Cova, pero claro, todo lo que son los accesos hemos tenido que modificarlos", comenta el capitán. "No es lo mismo asomarte a un mirador y ver cómo se nota la bajada de agua que estar en el propio embalse y comprobar desde el río los riscos que aparecen, los antiguos bancales, pueblos, bodegas…", añade sobre esta experiencia única que se realiza bajo reserva previa y puede contratarse tanto a través del restaurante de A Cova como directamente desde la empresa de Turismo Pantón. Además, la actividad de surcar el río Miño puede complementarse con la degustación de un vino de la Ribeira Sacra y un tentempié a bordo.
Experiencias de ocio y gastronomía
Más allá de las rutas fluviales por el Miño, en el entorno de la playa fluvial de A Cova es posible disfrutar de la mejor gastronomía y de actividades de ocio acuático gracias a la sinergia creada entre el restaurante dirigido por Diego Rodríguez y la empresa de turismo activo de Juan Miralla. "Y todo esto con salida desde uno de los puntos turísticos más famosos, al encontrarse la playa y el restaurante frente al meandro natural de Cabo do Mundo. Los servicios de gastronomía y ocio se ofrecen durante todo el año con planes adaptados y personalizados", aseguran desde el restaurante a través de la voz de Pablo Lomba. "El restaurante trabaja mucho con productos de proximidad y las propuestas del chef, Manu Rodríguez, que es una persona con mucha experiencia y que cada día trae una novedad", añade.
De hecho, a partir del 5 de noviembre arrancan unas jornadas gastronómicas que durarán todos los fines de semana del mes y estarán centradas en uno de los manjares más exquisitos del otoño: las setas. "Vamos a hacer un menú que consta de cinco platos degustación, todos ellos elaborados con distintas variedades de setas (…) trabajamos con cocina de mercado y cercanía, intentando ser creativos pero sin perder nunca esa cocina tradicional.", adelanta el propio cocinero. "Acompañaremos cada plato maridándolo con un vino de la Ribeira Sacra", agrega.
Cabe destacar asimismo que este restaurante lucense cuenta con su propia bodega de vino con viñedos a las orillas del Miño. Con todo, y a mayores de la carta habitual, este recetario de temporada contará con elaboraciones, aperitivos y postres tales como un rehogado de angula de monte con setas, cebolla y yema curada con polvo de chorizo, un lomo de merluza con vichyssoise y trompetilla de la muerte o una sobremesa hecha a base de castañas; así como diferentes caldos de la zona, desde rosados a albariños, mencías e incluso vinos dulces. En esta misma línea del menú otoñal, según apunta Manu Rodríguez, las jornadas gastronómicas de diciembre y enero girarán previsiblemente en torno al marisco y el cocido gallego.
En lo que respecta a la oferta de ocio acuático, desde el restaurante ofrecen la posibilidad de contratar todo tipo de actividades para disfrutar cada día en el entorno de la playa de A Cova, como alquiler de kayaks, paddle-surf, pedaletas o la reciente incorporación del aquabike. "También tenemos otra actividad muy interesante que es el alquiler de vespas eléctricas para recorrer la Ribeira Sacra", explica Lomba sobre una experiencia que permite descubrir sobre ruedas los paisajes mágicos de esta Galicia interior.