El nuevo puente peatonal en suspensión más largo del mundo está muy cerca de Galicia

Un auténtico paraíso para senderistas. Así es como promete ser el nuevo puente colgante de uso peatonal más grande del mundo, que se inaugurará con unas dimensiones de 516 metros de largo por 1,20 metros de ancho y 175 metros de alto. Enmarcado en los passadiços do Paiva, una ruta senderista de ocho kilómetros de recorrido en las laderas del río homónimo, el Arouca 516 está listo tras tres años de obras para su inminente apertura en otoño y espera convertirse en una de las mayores atracciones de aventura del norte de Portugal:

Una infraestructa "extrema"

La nueva estructura, instalada por la constructora Coduril y cofinanciada con fondos europeos, desbanca del primer puesto al Charles Kuonen Suspension Bridge de Suiza (494 metros de largo y 85 de alto) como puente peatonal suspendido más largo del planeta.

Vista cenital del puente (Ayuntamiento de Arouca)

La pasarela presenta un diseño contemporáneo compuesto por un ensamblaje de 14 cables y 127 módulos, muy bien adaptado al entorno en el que se integra. El suelo de rejilla metálica abierta no apta para vertiginosos pondrá a prueba a los más atrevidos. Su objetivo es ofrecer la mínima resistencia al viento y evitar así brusquedades durante las rachas más fuertes. La construcción consta de la máxima seguridad, por lo que cualquier atisbo de peligro será una mera percepción.

Pasadizos do Paiva (Ayuntamiento de Arouca)

Desde el puente se podrán contemplar las cascadas de Aguieiras, el puente de Alvarenga, la garganta del río Paiva, las playas fluviales de Areinho y Vau y los pueblos de Espiunca y Canelas, entre otros elementos que conforman el paisaje. Lamentablemente, la visita no es gratuita, por lo que debes consultar los precios y la nueva política de restricciones derivadas del coronavirus antes de acercarte.