En Galicia hay infinidad de playas, tanto costeras como fluviales para refugiarse de las altas temperaturas que estamos viviendo este agosto. Pero para los que tengan niños que ya se hayan cansado de la rutina estival en los arenales, los parques acuáticos también pueden ser una opción perfecta.
En Galicia tan solo existe un parque acuático como tal, el localizado en la localidad coruñesa de Cerceda. A la espera de que continúen las obras en Meis, en Ourense, donde estaba previsto otro recinto de estas características, los gallegos nos tendremos que conformar con encontrar las otras opciones dentro de la comunidad y en el norte de nuestro vecino, Portugal.
Aquapark de Cerceda
Imprescindible para todo el que tenga niños en Galicia durante el verano. El histórico parque lleva más de veinte años en funcionamiento y solo abre durante la temporada estival. Hay numerosas atracciones según los gustos de cada uno.
El recinto cuenta con tres parques infantiles, cada uno con una atracción principal: la rana, el pulpo, y el caldero. Los más aventureros pueden tirarse del kamikaze, el tobogán más alto del parque, con 54 metros de altura, mientras que los que quieran algo más relajado pueden optar por el jacuzzi que hay en medio del recinto.
Hasta el 11 de septiembre estará abierto de 12:00 horas a las 20:00 horas, y los precios de entradas son de 10 euros para adultos, y 7 para niños de entre 5 y 12 años, y 1 euros para menores de 4 años entre semana. Los fines de semanas y festivos, como en este puente, la entrada cuesta un euro más para todos los públicos.
Aquapark de Sanxenxo
No un parque acuático como tal, pero una buena opción para divertirse con la familia está en el parque flotante de Sanxenxo. En la playa de Baltar están localizados hinchables que cubren hasta 1.750 metros cuadros de superficie.
Sitios para trepar, toboganes y decenas de superficies desde donde saltar, el parque flotante de Sanxenxo es la mejor opción para un plan diferente si estás por las Rías Baixas.
Están abiertos de 11:30 a 20:00 todos los días, y las entradas se pueden comprar a partir de 10 euros por hora para los más pequeños y 12 euros por hora para los adultos. Para acceder a las instalaciones es necesario tener más de seis años y los miembros de la organización te proveerán del chaleco y el resto de material necesario para pasarlo como nunca.
Parque acuático de Amarante (Portugal)
A menos de dos horas de Vigo se encuentra este parque acuático, con más de 25 años de historia. De acuerdo con su página web se trata del primer y más grande recinto de montaña de este tipo en toda la Península y se encuentra dentro de un complejo que incluye casas rurales, gimnasios y otras utilidades para visitantes.
Al igual que el de Cerceda, el espacio cuenta con una multitud de opciones para los visitantes. Desde un tobogán con forma de sapo para los niños a un tobogán cerrado de 95 metros de alto, en el que al lado hay varios más. Cuenta el recinto con una piscina de olas, piscina de adultos y una fast mountain formada por un tubo oscuro, desde donde salas a una piscina alumbrada por la luz del día.
Está abierto hasta el 18 de septiembre, y las entradas para adultos comienzan a partir de los 17,72 euros para adultos, según el día que elijas ir. Los niños hasta 12 años y mayores de 65 años pagan por entrada un precio que ronda los 10 euros, también dependiendo del día.
Parque acuático de Fafe (Portugal)
A una hora y media de Vigo, también se encuentra otro parque acuático, en este caso en el distrito de Braga. El parque de Fafe incluye varios espacios de restauración, una piscina con vistas a la ciudad, además de un balneario.
El recinto cuenta con varias opciones de piscinas para adultos y niños. Los más pequeños podrán estar en las dos áreas de menor profundidad, que cuentan con una fuente en forma de un elefante y una estatua de un pingüino. Los más valientes podrán deslizarse por cualquiera de los nueve toboganes con los que cuenta el parque, además de otras animaciones que ofrece la organización.
Los menores de tres años entran gratis, mientras que el precio de entradas para los adultos está en los 13 euros entre semana y los 14,50 euros en fin de semana. Los menores de 12 años podrán entrar al parque por un coste de 7 euros los días laborables y 8,50 festivos y fines de semana.