Mamon Surf Co: La marca del coruñés Diego Bello con la que sus padres hacen frente al juicio

El coruñés Diego Bello fue asesinado en la isla filipina de Siargao en enero de 2020, un lugar donde llevaba dos años felizmente instalado con su propio negocio hasta que llegó para él una desgracia que nunca debería haber ocurrido. El joven murió a manos de tres policías que le dispararon, los mismos tres agentes que recientemente han sido arrestados por orden del juez titular del tribunal encargado del caso acusados de asesinato y falsificación de pruebas.

Ahora, sus padres, han contratado a un bufete de abogados de Manila (Filipinas) para hacer justicia para su hijo y en este contexto tiene un papel importante Mamon Surf Co, la marca de surf que el coruñés creó con ilusión.

Desde que comenzó esta pesadilla para la familia y amigos de Bello, son muchas las movilizaciones e iniciativas que se han llevado a cabo para que quienes le arrebataron la vida sin razón paguen por ello y su madre, Pilar Lafuente, actualmente está implicada junto al resto de la familia en la venta de ropa y merchandising de Mamon Surf Co para poder costear los gastos legales de todo el proceso judicial.

Sudaderas, camisetas, calcetines, tazas, tote bags…están disponibles en la página de instagram de la marca, en la que figura un teléfono para realizar los pedidos que se envían a cualquier parte, y en puntos físicos como la tienda de souvenirs familiar de Rúa do Vilar 15 o en la tienda de golosinas Frankis de la calle Barcelona de A Coruña, cuyo dueño es el tío de Diego. El nombre de la marca se debe a que así se llama un tipo de pan filipino, además de una isla próxima a Siargao, y el logo es una ola que a su vez hace una especie de juego con la M de la marca Mamon.

"Al contratar a los abogados tuvimos que pagar y cada paso que se da hacia un juicio tiene coste. Somos una familia normal, trabajadora, obrera…Mi marido y yo somos autónomos y no podemos hacer frente solos con nuestros ingresos a esto y no queremos donaciones ni dinero gratuito, por eso decidimos que la gente colaborase a cambio de algo", explica la madre del joven.

"Teníamos miedo porque Filipinas es un país corrupto"

Diego Bello con una camiseta de su marca en Siargao. Foto: CEDIDA

A día de hoy, la querella está admitida a trámite en el caso de Diego Bello y ya se han superado las tres fases necesarias para que el proceso siga adelante: la decisión de que el asunto es enjuiciable por parte de un fiscal inicial, un fiscal superior y un juez de Siargao. "Teníamos miedo porque es un país muy corrupto, pero este juez decidió que era enjuiciable y automáticamente se dictó orden de ingreso en prisión para los encausados", cuenta Pilar Lafuente. "Contratamos un bufete de abogados de Manila y son quienes están pendientes del caso junto a nuestro abogado de A Coruña, Guillermo Mosquera y todos están en contacto con el cónsul. Estamos pendientes de que se ejecute esta orden", comenta.

"Nuestro objetivo es que la gente que acabó con la vida de Diego que pague por eso de la mejor manera posible, que caiga todo el peso de la ley sobre esa gente. Si no salió de los policías implicados, queremos saber de donde salió esa orden, pero ahora solo nos podemos centrar en los tres acusados porque son quienes firmaron el parte de hechos de lo que hicieron", asegura.

Sobre la marca, han decidido implicarla en todo el proceso por la ilusión que suponía para Bello y todo el merchandising irá acompañado del hashtag #JusticiaparaDiego. Empezaron con esta iniciativa antes de Navidad y la familia está contenta "porque todo el mundo está respondiendo muy bien no solo a nivel Coruña y Galicia sino también fuera de la comunidad", algo que su madre achaca a que el joven coruñés "tenía cantidad de amigos repartidos por todo el mundo".

Rememora con cariño su marcha de la casa familiar con 19 años para ir a aprender inglés a Londres, un destino al que luego le siguieron Australia, Tailandia, Berlín, entre otros. Asimismo, el pasado diciembre vendieron participaciones de lotería para costear los gastos jurídicos del proceso y la familia consiguió vender casi un número en su totalidad.

Un joven familiar con don de gentes y la vida centrada en el surf

"Era instructor de buceo y el surf era su vida", reconoce, y subraya que era la segunda vez que su hijo estaba en Filipinas. "Tenía don de gentes, era muy cariñoso, amigo de sus amigos y dejó siempre huella por donde pasó. Era un espíritu libre y le gustaba conocer culturas y formas de vivir y ser de la gente", detalla Lafuente, que echa la vista atrás hacia las dos ocasiones en las que visitó a su hijo en el país, donde vio cómo vivía, por donde se movía y el aprecio que la gente local le mostraba.

"A pesar de que estaba lejos hablábamos a diario con él porque era muy familiar y estaba muy unido a nosotros. Era muy expresivo y sabíamos cuando estaba o no estaba bien y en lo que pasó desconfiamos de alguien y podemos pensar mil cosas pero tenemos que ceñirnos a los hechos", lamenta. Sobre el proceso judicial, Lafuente es consciente de que "no es inmediato y se alargará en el tiempo" pero la madre de Bello traslada que ahora mismo todas sus fuerzas están centradas en que el juicio salga para adelante. La familia se ha reunido en estos meses con "gente de altas y bajas esferas" y exponen que "gracias a la diplomacia ejercida por España con Filipinas están ahora mismo en este punto".