Alú Ibérica protesta en la coruñesa plaza de María Pita: "La solución, una intervención"

Los trabajadores de la planta de Alú Ibérica en A Coruña convocaron una manifestación para esta mañana en la plaza de María Pita. Cientos de personas se congregaron enfrente del ayuntamiento coruñés para reclamar que el Gobierno investigue la venta de las factorías y garantice el futuro de sus empleos mediante una intervención.

El Comité de Empresa de Alú Ibérica ya había organizado una marcha en coche por el centro de A Coruña en defensa de la industria del aluminio en la ciudad. La concentración de hoy, al igual que la caravana de vehículos del pasado jueves 28, se centró en pedir soluciones para que se asegure que la planta no se cierra. El comité pidió, a través de la convocatoria, que los asistentes acudiesen con mascarilla como método de protección, tal y como establece el protocolo actual por el coronavirus.

Los trabajadores, de los que siete se encerraron en el ayuntamiento de A Coruña a modo de protesta el pasado miércoles, lanzaron varias proclamas dirigidas al Gobierno central. "La solución, una intervención" fue una de las más repetidas durante una mañana por parte de los empleados de la fábrica, cuyos representantes aseguran que existe un "problema de gestión" y que "falta suministro de materia prima para trabajar".

Un momento de la concentración hoy en A Coruña en una imagen cedida por el ayuntamiento.

Partidos políticos como Marea Atlántica, BNG, Esquerda unida y el Partido Comunista, así como varios sindicatos, mostraron su apoyo a los trabajadores de forma presencial y a través de las redes sociales. "El concello estará siempre al lado de las trabajadoras y defendiendo una industria que es fundamental para el futuro económico de A Coruña y de su área metropolitana", aseguró la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, que también acudió a la concentración.

La socialista indicó que el Ministerio de Industria aclarará en la Mesa Técnica del día 11 las irregularidades en la venta al Grupo Riesgo y que actuará para defender la viabilidad de la fábrica. Además, Rey exigió a la Xunta de Galicia que asuma sus competencias en el conflicto y que "se ponga a trabajar" para garantizar el futuro de los trabajadores y de la industria en la comarca.