El exalcalde de Coristanco (A Coruña), acusado de prevaricar, niega favores a una empresa
La Fiscalía pide para él cuatro años y medio de cárcel y 36 años de inhabilitación
15 octubre, 2021 14:01A CORUÑA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) –
El que fue alcalde de Coristanco por el PP durante más de 20 años, Antonio Pensado, ha negado que durante su mandato favoreciese a unos empresarios, que tenían conformada una empresa con su madre y otra entre ellos tres. "Siempre seguí instrucciones de los técnicos", ha dicho en referencia a las decisiones que llevaron a que se le adjudicase a las empresas, propiedad de la misma familia, determinados contratos.
Así lo ha expuesto en el juicio que se celebra en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña, contra él y contra los empresarios, tres hermanos, por unos hechos que se remontan a 2009 y 2013.
En su escrito de calificación, Fiscalía pide 4 años y medio de cárcel y 36 de inhabilitación para el exregidor por delitos de prevaricación y falsedad en documento oficial, supuestas irregularidades detectadas en la contratación de obras públicas y en la concesión de una planta de tratamiento de lodos.
El Ministerio público señala que a lo largo de sus 24 años al frente de la Alcaldía de este municipio coruñés, Antonio Pensado desarrolló una "relación muy cercana y estrecha" con los propietarios de este grupo de empresas. Dada esta "estrecha relación", considera que la Alcaldía "no dudó en favorecer la actividad" de ellas.
Además, apunta que los tres empresarios acusados no dudaron "en solicitar directamente a la Alcaldía" la toma de determinadas decisiones para lograr beneficios económicos. Precisamente, a estas tres personas el Ministerio público atribuye delitos de prevaricación continuada y tráfico de influencias, por los que reclama penas que oscilan entre los dos años y tres meses y los dos años y cuatro meses de cárcel.
La Fiscalía recuerda que en agosto de 2013 la secretaria municipal, que había accedido al cargo en 2011, interpuso una denuncia en la que exponía que estaba siendo sometida a "presiones" que, a su juicio, respondían a "unas claras irregularidades en la contratación administrativa de obra pública" y "también de servicios por parte de la dirección" del ayuntamiento al observar que "sistemáticamente se estaba beneficiando" a las empresas pertenecientes a los citados empresarios.
Entre otras cuestiones, el escrito de acusación detalla que, de 45 expedientes de contratación de obra pública relativos al periodo 2009-2013, el grupo de empresas de los acusados resultó adjudicataria de "30 licitaciones", casi el "70%" y por las que facturó un total de 2.368.234,89 euros.
Versión de los acusados
El que fuera alcalde de Coristanco por el PP entre 1991 y 2014 — absuelto el pasado mes de julio de los delitos de malversación, prevaricación y fraude con hormigón y gasóleo– ha respondido solo a las preguntas de su abogada y no de las demás partes personadas, Fiscalía, acusación particular y el resto de las defensas.
En su declaración, se ha remitido en varias ocasiones a las decisiones de los técnicos en relación a las empresas a las que se les daba el contrato. "Fueron los técnicos los que hicieron todo", ha dicho, asegurando, además, que la relación que mantenía con estos empresarios era la de "vecinos" y negó que le hubiesen invitado a un viaje. "Solo coincidimos", ha dicho sobre su estancia en Almería cuando era alcalde.
"Hay planes que llevaron mucho más otras empresas que estas", ha manifestado también, asegurando que las que son propiedad de los empresarios que se sientan en el banquillo "no llegarían ni al 20%". "Eran los técnicos los que abrían los sobres de adjudicación", ha incidido en otra parte de su declaración.
Por otra parte, ha admitido que no había una buena relación con la secretaria municipal de entonces, pero ha responsabilizado de este "enfrentamiento" a ella. También sostuvo que, a raíz de que le abrió un expediente disciplinario, fue cuando derivó las supuestas irregularidades a Fiscalía. Además, ha defendido que "siempre" actuó "respetando la legalidad".
En la misma línea, uno de los empresarios ha limitado a la de vecinos su relación con el exalcalde. También dijo que hasta finales de 2012 era su madre la que realizaba todos las gestiones vinculadas con la empresa y que él se limitaba a actuaciones vinculadas con las obras.
Preguntado por su abogado, ha explicado que los precios con el ayuntamiento de Coristanco eran "ajustados", al ser cuestionado por las obras que se les adjudicaban, pero ha añadido que se presentaban igualmente porque "estaba al lado de casa". Y es que, según ha expuesto, lo hacían por el ahorro de los costes de desplazamiento de maquinaria y personal a otros ayuntamientos.