La orilla del embalse de Cecebre, en Cambre (A Coruña).
Cambre (A Coruña) inicia las obras de un paso bajo la AC-221 para las nutrias de Cecebre
Cuatro ejemplares fueron atropellados entre 2017 y 2018 debido a los cambios de localización que estos mamíferos realizan entre el embalse de Abegondo-Cecebre y el río Mero
9 diciembre, 2020 12:59El Concello de Cambre (A Coruña) prevé iniciar esta semana la construcción de un paso para las nutrias en la AC-221, en el embalse de Abegondo-Cecebre. Este espacio natural se convirtió en los últimos años en el hogar de varios ejemplares de estos mamíferos que viven entre el río Mero y el agua del embalse, pero su movilidad entre ambos puntos provocó más de un atropello y pone en riesgo la conservación de la especie.
Un informe del Grupo Naturalista Hábitat señala que entre 2017 y 2018 se produjeron cuatro atropellos en el mismo lugar. El ayuntamiento consultó múltiples expertos en la materia y determinó que la creación de un paso para la fauna podría ser la medida más eficaz para solucionar el problema. “El objetivo de estas actuaciones es garantizar la conservación de esta población de nutrias, pero también la de muchas otras especies que habitan esta zona. El embalse de Abegondo-Cecebre tiene una rica biodiversidad de flora y fauna, y una de nuestras premisas es promover su preservación”, explica la concejala de Medio Ambiente e Mobilidade, Patricia Parcero.
El proyecto
"El proyecto incluye la ejecución de un paso inferior bajo la AC-221 mediante la instalación de un caño y boquillas con rampa asociada en cada extremo de la carretera. Asimismo, y con el fin de garantizar que los animales utilicen esta senda, se acometerá el vallado perimetral de los dos extremos de la vía por donde suelen cruzar", indica el Concello de Cambre en una nota.
El ayuntamiento ya tiene todos los permisos necesarios para ejecutar el proyecto, como el de la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI), el de Augas de Galicia, el de Patrimonio Natural y el de la Agencia Estatal de Seguridade Aérea (AESA). Las obras tendrán afección en una zona propiedad de Emalcsa, quien también dio su beneplácito al municipio, con el que colaboró desde el principio. La ejecución de la senda se realizará con una subvención del GDR Mariñas-Betanzos y tendrá un coste de 15.257,20 euros.
