La presidenta andaluza, Susana Díaz, está dispuesta a hacer valer su liderazgo en las filas socialistas para que las negociaciones poselectorales en busca de mayorías no se desvíen del ideario del PSOE. Tras recordar que es el Comité Federal y no el secretario general el que marca las directrices en ese ámbito, ha descartado cualquier acuerdo con el PP y también con Podemos, al menos mientras este partido mantenga como condición para cerrar alianzas la convocatoria de un referéndum de autodeterminación en Cataluña.
Las manifestaciones de Susana Díaz son, de entrada, un nuevo aviso a su partido y al secretario general: no va a permitir alianzas a cualquier precio, "porque para los socialistas, con la unidad de España no se juega". En su misma posición están otros barones, como Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha), Guillermo Fernández-Vara (Extremadura) y Javier Fernández (Asturias). Habría que recordar, de cualquier forma, que no siempre fue así, y que en época de Zapatero el PSC cerró un tripartito en la Generalitat con un partido como Esquerra Republicana de Catalunya.
Podemos plantea "imposibles"
Por otra parte, el rechazo de Díaz a los populares aparca la posibilidad de un acuerdo a tres bandas con Ciudadanos, que reivindicó EL ESPAÑOL como garantía de estabilidad y del que se han mostrado partidarios líderes como Núñez Feijóo y organizaciones como Libres e Iguales. Está claro que es un alternativa que tiene que madurar y que no se planteará realmente hasta que no fracase el intento de investidura de Rajoy y asome la amenaza de unas elecciones anticipadas.
Sin embargo, lo más llamativo de las palabras de Susana Díaz es su ataque frontal a Podemos. Según la secretaria general de los socialistas andaluces, Pablo Iglesias trata de aparentar que trabaja por la unidad de la izquierda cuando, en realidad, la dinamita planteando "imposibles". Díaz lo tiene claro: "A Podemos no le preocupa que Mariano Rajoy esté en Moncloa, sino que lo que quiere es ganarle al PSOE". Con esa estrategia, Iglesias estaría intentando "eliminar al PSOE".
Dudas sobre Iglesias
La dirigente socialista da dos argumentos que avalan su tesis. Si Podemos quisiera realmente un entendeimiento con el PSOE no pondría como requisito el derecho de autodeterminación, sino asuntos como la defensa del Estado del bienestar, la sanidad o la educación. El segundo tiene que ver con la actitud de Podemos en Andalucía, donde se negó a llegar a acuerdos en la Junta tras más de dos meses de negociaciones. Al final fue Ciudadanos quien facilitó la investidura.
Susana Díaz cuestiona la autonomía de Pablo Iglesias para alcanzar pactos y recuerda que es rehén de sus socios electorales: "el 40% de sus votos vienen del independentismo". Iglesias publicaba el pasado miércoles en el Huffington Post un artículo titulado "A Pedro no le dejan", en el que cuestionaba la capacidad de liderazgo de Sánchez en el PSOE. Lo que, con fundamento, le contesta ahora Díaz, es si no será él quien tiene las manos atadas por Ada Colau, Compromís y las Mareas.