La bomba de calor Aira

La bomba de calor Aira Aira Omicrono

Tecnología

Adiós a la factura del gas: la revolucionaria bomba de calor compacta que permite ahorrar hasta 1.000 euros al año

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Las últimas predicciones meteorológicas anuncian una bajada general de las temperaturas en buena parte de España, y conviene estar preparados para el frío. Ya sea con inventos para potenciar el calor de los radiadores o para calentar grandes habitaciones en minutos, la tecnología está evolucionando para ofrecer soluciones cada vez más eficientes y sostenibles. Entre los sistemas que permiten un mayor ahorro tanto energético como económico destacan las bombas de calor. Aira, una innovadora empresa sueca, quiere ser una de las líderes en Europa en el sector con productos cada vez más avanzados y compactos.

Aira se ha presentado, tanto por su origen como por su propuesta de pago por suscripción, como "el Spotify de las bombas de calor". Y es que los principales inconvenientes de estos sistemas son un coste inicial muy elevado y la compleja instalación de equipos voluminosos. La última novedad de la compañía, llamada Aira Indoor Unit Compact, pretende romper moldes como "una de las soluciones de bomba de calor más delgadas y flexibles del mercado". Su diseño minimalista y su reducido tamaño permiten instalarla en cualquier habitación sin desentonar. 

Diseñada con la última tecnología aire-agua del sector y con la inconfundible elegancia de los muebles escandinavos, esta unidad de interior puede instalarse en el espacio que ocupa la caldera de gas, presente en millones de hogares españoles. El depósito de agua caliente sanitaria es independiente, para que los usuarios de esta nueva bomba de calor puedan colocarla donde quieran, desde un armario de la cocina hasta el baño o el garaje.

Así funciona la bomba de calor Aira

"Al reducir significativamente el tamaño de su bomba de calor y ofrecer una de las unidades más compactas del mercado, Aira pretende atraer a más hogares y permitirles cambiar a soluciones de calefacción más respetuosas con el medioambiente", afirmó Anna Gustavsson, directora de producto de la empresa, en un comunicado de prensa.

El precio depende de la solución escogida y la capacidad del depósito de ACS de hasta 300 litros, pero lo mejor es la posibilidad de fraccionar el pago en un formato de suscripción mensual, que ya se aplica en Suecia, Italia y Reino Unido, donde opera Aira. En EL ESPAÑOL-Omicrono hemos consultado por los planes de la empresa para empezar a operar en España, sin respuesta de momento.

Cómo funciona

El sistema de Aira se basa en una bomba de calor aire-agua, que utiliza la energía térmica del aire exterior y electricidad para calentar el agua de la casa. Ésta se distribuye a través de la red de radiadores o calefacción por suelo radiante para mantener la casa caliente y, al mismo tiempo, proporciona el suministro necesario para los grifos y las duchas.

La eficiencia energética es su mayor virtud: supera en 4 veces la eficiencia de las calderas de gas o gasóleo, por lo que reducen de media los costes de calefacción entre un 25 y un 40%, y del 100% en las emisiones domésticas de CO2 si se utiliza energía solar o procedente de otras fuentes renovables. Según los cálculos de la empresa, en un hogar medio de Alemania eso supone un ahorro anual cercano a los 1.000 euros, cifra que podría variar en España, ya que está calculada según los precios de la energía en el país germano.

La unidad exterior, que en este caso también tiene un aspecto más cuidado y elegante de lo habitual, se encarga de aspirar el aire circundante mediante un ventilador y extrae calor de él. El calor es absorbido por el refrigerante R290 de la bomba de calor (que además es natural y no contaminante, a diferencia del de muchos aires acondicionados), que pasa de líquido a gas. A continuación, la bomba de calor comprime el refrigerante vaporizado, aumentando su temperatura y transformándolo en un líquido caliente.

El siguiente hito del proceso es pasar esa sustancia por un intercambiador de calor, donde se aprovecha para elevar la temperatura del agua del hogar hasta los 75 ºC. Ésta se almacena en la unidad interior del sistema y en el depósito de inercia (o acumulador de agua caliente) antes de distribuirse por toda la casa.

Calefacción inteligente

La última de sus soluciones, la Aira Indoor Unit Compact tiene unas medidas de 40 × 25 × 72 cm, aproximadamente una cuarta parte del tamaño de su bomba de calor todo en uno de 100 litros. También sorprende por su diseño minimalista, con líneas limpias y señales luminosas que ofrecen información en tiempo real sobre el funcionamiento del sistema.

"Queríamos aportar otra solución a nuestra cartera de productos de tecnología de energía limpia que puede facilitar aún más el cambio a una bomba de calor", afirmó Gustavsson.

La app de Aira permite controlar los ajustes y consultar los consumos

La app de Aira permite controlar los ajustes y consultar los consumos Aira Omicrono

Otra de sus ventajas es su versatilidad. Es compatible con distintos acumuladores de agua caliente de Aira, de tamaños entre los 150 y los 300 litros, capaces de garantizar un suministro continuo de agua caliente para hogares de hasta seis personas. La unidad interior se encarga de procesar los datos del sistema, analizar los hábitos de los usuarios y las condiciones meteorológicas para optimizar al máximo el consumo de energía.

Los otros dos elementos clave del sistema de Aira son la app para iOS y Android, que permite controlar todos los ajustes y consultar el consumo, y el termostato inteligente con una interfaz intuitiva. El aparato, que funciona con pilas para facilitar su colocación e instalación en cualquier habitación, también se encarga de recopilar datos sobre el calor y la humedad de cada estancia para mejorar el confort de los habitantes del hogar. 

Además de todos estos motivos, las restricciones de la legislación europea y las ayudas para el cambio de calderas de gas también contribuyen al cambio. El objetivo de la UE es que en 2035 ya no haya calderas de gas, y desde 2028 los nuevos edificios en construcción tendrán prohibido instalarlas. En cuanto a las subvenciones, actualmente hay varias tanto gubernamentales como autonómicas y municipales, por lo que el importe final de la unidad y la instalación puede reducirse considerablemente.