El gotelé es una técnica usada para el revestimiento de paredes que consiste en esparcir una pintura más espesa de lo normal, siendo aplicada de manera que aparecen gotas o grumos de material que hacen que exista un acabado final grumoso. Este fue utilizado durante décadas y llegó a adquirir una gran popularidad, en gran parte porque servía para disimular las imperfecciones de las paredes, ya fuese porque estas no estuviesen rectas, presentasen algún desnivel, etcétera.
Sin embargo, con el paso de los años, y ante la existencia de otras opciones para disimular desperfectos, ha sido una práctica que ha ido cayendo en desuso, y por ello son muchas las personas que en sus hogares buscan acabar con este elemento decorativo que se hizo especialmente popular en la década de los 90. Para conseguirlo, se puede seguir el trucazo de Leroy Merlin para eliminar sin obras ni complicaciones.
Es muy posible que, a la hora de afrontar obra en cualquier vivienda de segunda mano o que fuese construido o reformado en los 90, cuente con gotelé en sus paredes, y para eliminarlo era habitual lijar las paredes o agregar masilla hasta conseguir que las paredes volviesen a estar lisas. Este es un proceso que puede salir caro, sobre todo si hay que recurrir a los servicios de un profesional, con el coste que ello supone.
El truco de Leroy Merlin para eliminar el gotelé
Afortunadamente, desde la cadena de bricolaje, Leroy Merlin, se pone a disposición de sus clientes un producto que ha sido concebido para poder quitar el gotelé de una forma sencilla. Se trata del papel pintado, que es una gran opción para deshacerse del gotelé, que se podrá eliminar con una espátula, y aunque el resultado sea un tanto irregular, gracias a este papel el acabado será perfecto.
Para este tipo de casos, el papel de base TNT o textil es perfecto, pues una vez eliminado el gotelé utilizando una espátula, tan solo habrá que aplicar cola adhesiva sobre la pared, sin que sea necesario prepararla previamente ni encolar el propio papel. Además, llegado el momento en el que se desee darle un nuevo cambio a esa estancia, será tan sencillo como despegar la pieza, sin que queden restos en la pared. Sin embargo, la alta calidad y la resistencia frente al desgaste del papel pintado de Leroy Merlin hacen que sea una opción ideal.
El papel pintado vinílico se ha convertido en una de las opciones más populares para revestir las paredes, diferenciándose del resto en que posee una capa impermeable que lo recubre y que hace que sea lavable y con una elevada resistencia al calor, la humedad y al propio desgaste. Este modelo imita la rafia y aporta un toque natural y luminoso que lo hace ser perfecto para las estancias más pequeñas.
Una característica que lo diferencia de otros papeles pintados, es que, aunque se puede ensuciar como cualquier otro, en este caso se puede lavar, al contar con una composición que posibilita su limpieza sin riesgos de que se sufran daños en su aspecto, siendo suficiente con usar una bayeta húmeda, agua y jabón neutro, sin necesidad de raspar. De esta manera, ofrecerá siempre la mejor apariencia.
Leroy Merlin asegura que es importante que el papel no se deteriore con las rozaduras o el propio desgaste, pero de igual modo recalca que sus colores y motivos se consiguen mantener inalterables con el paso del tiempo. Además, sus modelos cuentan con resistencia frente a la incidencia de los rayos del sol, manteniendo su diseño original en todo momento.
El diseño atemporal de estos papeles pintados de Leroy Merlin los hace perfectos para cualquier hogar, pudiendo así decir adiós de forma definitiva al gotelé. Además de ofrecer un bonito acabado, todos los papeles pintados están clasificados en función de su comportamiento con el fuego. De esta manera, eligiendo un modelo que no se inflama ni ayuda a propagar las llamas se le estará aportando una seguridad adicional al hogar.
Las ventajas del papel pintado
Apostar por el uso de papel pintado en el hogar tiene diferentes ventajas que conviene destacar, comenzando por el hecho de que permite crear combinaciones únicas y exclusivas, algo que no sucede con la pintura, que se limita a determinados colores y tonos. En cambio, con un papel decorativo, las posibilidades son infinitas, pudiendo crear efectos ópticos y combinaciones más que interesantes.
Existe una amplia variedad de estilos y diseños entre los que poder elegir, lo que posibilita encontrar un papel que se adapte al estilo de la decoración, pudiendo optar tanto por opciones clásicas como por estampados modernos. Así, se puede encontrar el papel pintado perfecto para cada habitación del hogar, incluso para el baño o la cocina, pues hay modelos especialmente diseñados para espacios húmedos.
Más allá de las posibilidades que ofrece en lo que respecta a su diseño, actualmente son fáciles de poner y quitar, por lo que prácticamente cualquier persona puede instalarlo con un acabado perfecto, pero también sencillos de limpiar y con una alta resistencia a los golpes, que son dos características que hacen que mejore a la pintura.
Además, ofrecen una gran flexibilidad, pues se adaptan sin problemas a todos los espacios de la vivienda, haciendo que se pueda instalar el papel decorativo en cualquier estancia, independientemente de su estructura.