La eólica y la solar son las dos energías renovables más utilizadas en España; y desde hace unos años son muchos los ciudadanos que acuden a ellas con el objetivo de bajar sus facturas, ya sea instalando turbinas de pequeño tamaño en el tejado o placas fotovoltaicas en el balcón de sus casas. Aun así, también existen tecnologías que combinan ambas energías para sacarles el máximo provecho, como un invento que carga miles de coches eléctricos en cualquier lugar. Lo último en llegar es Soleolico, un aerogenerador español con placas solares en sus palas capaz de dar electricidad gratis a cuatro casas.

Frente al cambio climático y la responsabilidad global por el cuidado del planeta y su sostenibilidad, la empresa Soleolico ha diseñado un dispositivo con el objetivo de desempeñar un papel fundamental en la transición energética a escala global. Se trata de un aerogenerador con tres palas que incorporan cuatro placas solares cada una y que es totalmente personalizable, capaz de generar energía verde las 24 horas del día y hasta de absorber y transformar el dióxido de carbono (CO2); y cuyo prototipo ha estado instalado durante unos días en la zona exterior del Palacio de la Magdalena de Santander.

"El proyecto surgió hace más de 10 años y se han invertido más de 5 millones de euros. Buscamos una forma de unir la energía eólica con la solar y tras más de 30 prototipos dimos con el que tenemos en la actualidad, que representa el primer aerogenerador del mundo que integra solar y eólica, además de un almacenamiento. También absorbe el CO2 y otros gases nocivos del ambiente y los convierte en carbonatos o sales neutras y oxígeno. Se podría decir que es como un árbol tecnológico que genera energía y, a la vez, purifica el aire que respiramos", explica Pablo Fernández de la Torre, director general de Soleolico, a EL ESPAÑOL - Omicrono.

Energía para 4 casas

Soleolico es un innovador aerogenerador que tiene tres palas, "aunque nosotros las llamamos velas", con cuatro placas solares cada una. Estas velas aerodinámicas son orientadas al viento mediante el "guiado de lamas, que es un sistema que hemos patentado. Es, básicamente, un disco magnético que, en cuanto se mueve la vela, él también lo hace y hay un campo magnético que dependiendo la fuerza que metas hace que se mueva más o menos". Esto lo que permite es absorber del viento "el efecto de arrastre, cuando va a favor del viento, y de sustentación, cuando va en contra. Y con esto aumentamos el rendimiento y extraemos la máxima energía". 

Este "árbol tecnológico" es totalmente personalizable, incluso se le puede poner publicidad; y es capaz de convivir en armonía con su entorno, generando una energía limpia con un mínimo impacto y eliminando los gases de efecto invernadero. "El recubrimiento es único, está patentado y está impreso en 3D con agentes naturales, por lo que absorbe y transforma el CO2", para, de esta manera, limpiar el aire que se respira. De hecho, durante la presentación de esta tecnología la compañía detalló que una instalación de 1.000 unidades de Soleolico puede absorber la misma cantidad de dióxido de carbono que 287 árboles en un año. 

El aerogenerador Soleolico. Xaiver d'Arquer/Doblestudio Omicrono

Este "árbol tecnológico" tiene unas palas con unos brazos que pueden extenderse hasta los cinco metros, según las condiciones climáticas. Mientras que las velas "se mueven a seis revoluciones por minuto y no hacen ruido", miden en torno a los dos metros y pueden funcionar y generar energía con vientos de 12 kilómetros por hora. Incluso Soleolico es capaz de soportar vientos con velocidades de más de 80 km/h. "También se puede diseñar un recubrimiento a medida para la torre, impreso en 3D, que consiga mimetizarse con el entorno o que tenga un aspecto determinado", explica Pablo Fernández de la Torre. 

Una de las características diferenciales de esta tecnología es su capacidad eólica, "ya que ofrece un rendimiento hasta un 25% superior respecto a los aerogeneradores actuales en las mismas condiciones de viento. Un Soleolico en condiciones óptimas puede generar energía para cuatro viviendas en una urbanización, por ejemplo. Una sola unidad puede llegar a producir 7,5 kW pico de energía eólica, con vientos inferiores a 50 km/h, y 4,6 kW pico de energía fotovoltaica, con un almacenamiento en batería de un máximo de 20 kWh".

[El revolucionario aerogenerador que lo cambiará todo: produce electricidad sin viento]

Otros de sus puntos claves son que es fácil de instalar y que no requiere de mantenimiento. "Es mínimo porque se ha hecho para dure. Es más complejo que poner unas placas solares, porque hay que poner unos cimientos que soporten y hagan segura la torre. Pero es una instalación sencilla y una obra mínima que se hace en un día", explica el directivo. La compañía señala que su "árbol tecnológico", por su tamaño y potencia de 10 KW, se puede utilizar "tanto en parques de generación como en soluciones de autoconsumo, como en almacenes, gasolineras, puertos, viviendas o invernaderos, entre otros. Incluso se pueden llevar a polígonos industriales o zonas remotas, como una isla".  

Principales ventajas

Soleolico ofrece una serie de ventajas en comparación con otros sistemas similares. La primera de ellas es que es un invento "único que combina generación eólica, solar y almacenamiento en un solo aparato, proporcionando energía verde durante todo el día". La segunda es su capacidad para absorber y transformar el CO2, seguido de que "al ser una turbina de eje vertical, es más eficiente y menos sensible a las diferentes direcciones del viento, y ofrece un menor impacto visual y ambiental. Incluso ofrece un menor riesgo para la vida terrestre y una mayor durabilidad en condiciones extremas gracias a su diseño robusto". 

El aerogenerador Soleolico en Santander. Xaiver d'Arquer/Doblestudio Omicrono

También destaca por ser accesible, "ya que al contar con una configuración modular que permite adaptar el sistema a cualquier sitio, tiene un precio más barato. Es una inversión similar a la de otros aerogeneradores de mimi eólica". Con un primer modelo ya presentado, ahora los planes de la compañía pasan por crecer rápidamente, y es que el directivo de Soleolico asegura que "en un plazo de 15 años queremos haber absorbido el 1% del mercado mundial de renovables. Es muy ambicioso, pero por las características del producto se puede lograr. Si se traduce significaría haber vendido 4 millones de Soleolicos, aunque nuestro objetivo es que ofrezca una energía accesible para todos los bolsillos.".

Respecto a posibles clientes, Pablo Fernández de la Torre señala que la compañía tiene un proyecto inicial en Sicilia (Italia) para levantar un parque de 100 Soleolicos, y que "ya se han interesado diferentes instituciones y empresas por nuestro producto, como Ikea". Mientras que también hay interés de lugares como las islas griegas, República Dominica, Guatemala y Oriente Medio. En España ha estado colocado durante días el primer modelo en Santander, y "ahora estamos instalando otra unidad en Extremadura". 

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