Las continuas subidas de precio de Netflix en España a lo largo de los últimos años han hecho que muchos usuarios de este país busquen alternativas más allá de las fronteras. Turquía es, sin duda alguna, el que más llama la atención para obtener una suscripción a este servicio de streaming debido a que su moneda se encontraba con una ventajosa tasa de cambio respecto al euro.
Pero la inflación galopante —superior al 80%— en el país euroasiático también está afectando a las cuotas de Netflix, lo que provoca que muchos usuarios con cuentas allí estén experimentando una subida de precio. La filial turca del servicio de streaming publicó que el aumento de precios se aplicaba a partir del 21 de enero.
De esta forma, el plan de suscripción más básico pasa de 45,99 liras turcas (2,26 euros) a 63,99 liras (3,14 euros). Esta sería la forma más barata de tener una cuenta en Netflix, pero con algunos recortes como la calidad de la imagen o la limitación a un único dispositivo para ver contenido al mismo tiempo.
[Cómo cancelar tu cuenta de Netflix fácilmente hasta de que te suban el precio por compartirla]
El plan estándar pasa de 69,99 liras (3,43 euros) a 97,99 (4,81 euros) mientras que la versión premium de la suscripción hace lo propio desde las 93,99 liras (4,61 euros) a 130,99 liras (6,43 euros). Para ponerlo en perspectiva, este último plan que es el más completo cuesta en España 17,99 euros, casi 3 veces más. Una proporción que se cumple en el resto de suscripciones.
La subida de hace unos días supone la tercera en los últimos 12 meses en los planes de suscripción de Netflix en Turquía; haciendo cada vez menos atractivo la contratación desde terceros países que originalmente se aprovechaban de una situación ventajosa del euro frente a la lira.
Además, llega en un momento un tanto delicado para la compañía estadounidense en España. Hace unos días, Netflix comenzó a allanar el terreno para prohibir que una misma cuenta se comparta entre personas que no viven en una misma casa. Incluso las suscripciones premium que permiten el visionado simultáneo de 4 dispositivos.
La polémica y el revuelo generalizado estaban servidos y muchos usuarios amenazaban con darse de baja totalmente del servicio. Finalmente, Netflix dio marcha atrás y afirmó que había habido un error con las cuentas compartidas.
La polémica duró, por tanto, poco más de 24 horas hasta que cambiaron la sección de preguntas frecuentes donde se abría la puerta a la prohibición de compartir cuentas. Aunque este último parece ser una decisión en firme por parte de la compañía, que estaría buscando la fórmula más conveniente tanto de ejecutarla como de explicarla a sus usuarios.