Los misiles anticarro Spike LR2 acaban de estrenarse en el Ejército de Tierra de España como parte de un programa de reemplazo de material militar antiguo. Este nuevo sistema se disparó por primera vez el pasado 23 de marzo dentro de unas maniobras realizadas por el propio arma en San Gregorio (Zaragoza). Versiones más antiguas de este misil ya sirven dentro del Ejército tanto en la división de tierra como en la Armada y esta renovación supone una mejora considerable respecto a ellas.
Para la ocasión, se utilizó uno de los nuevos lanzadores iCLU (Integrated Command Launch Unit o Unidad de Lanzamiento de Comando Integrada) recientemente adquiridos por el propio Ejército de Tierra. El ejercicio se llevó a cabo desde un todoterreno en la modalidad "disparo a coordenadas sin línea de vista del objetivo (modo AUTO)", según recoge PAP Tecnos, socio en España de la compañía israelí Rafael, en sus redes sociales.
Este modo automático es "una de las principales funcionalidades adicionales que ofrece la nueva versión de misil Spike LR2 frente a la versión anterior Spike LR Dual", prosiguen. En el mismo ejercicio del pasado día 23, se gestionó la preparación de la misión y los datos cartográficos a través de la tablet SUDOCU —también de reciente adquisición— "donde se tiene la posibilidad de carga de mapas para proceder al disparo a coordenadas, así como la adquisición del rumbo de lanzamiento a través de la herramienta North Keeper".
Misil Spike inteligente
El sistema anticarro Spike es uno de los grandes éxitos de ventas de la compañía Rafael en todo el mundo. En servicio desde los años 80, ha estado presente en una buena cantidad de conflictos armados como en la Guerra del Líbano, en Irak o en Afganistán hasta que Estados Unidos abandonó el país el pasado verano. Fruto de estas 4 décadas de operatividad, la compañía ha ido actualizando el arma y creando diferentes versiones.
La versión que acaba de probar el Ejército de Tierra de España entró en servicio a finales de 2018 convirtiéndose en un sistema anticarro de quinta generación que ya se encuentra presente en España. Algo que tuvo en cuenta el Ministerio de Defensa cuando decidió adquirir esta nueva tanda, ya que "favorece la interoperabilidad y la reducción del coste del ciclo de vida, mediante la posibilidad de intercambio de componentes", señalan en un informe.
El Spike LR2 dispone de un buscador electroóptico que incluye un sensor infrarrojo no refrigerado y un sensor diurno de color de alta definición para el apartado del guiado del misil. Este nuevo buscador incluye capacidades de rastreo de objetivos mediante Inteligencia Artificial para mantener el bloqueo del objetivo, "incluso en condiciones extremas [...] y casi sin necesidad de intervención del tirador".
Rafael también ha aumentado la letalidad de esta versión para lo que han incluido un par de configuraciones de ojivas avanzadas de gran capacidad. Una de ellas es una ojiva Tándem HEAT especialmente diseñada para aumentar la penetración en el blindaje del misil Spike más de un 30% respecto a anteriores modelos. La otra se corresponde con una nueva ojiva explosiva multipropósito, que incluye una explosión controlada por el tirador.
Si se selecciona el "modo de retardo", la nueva ojiva puede perforar hasta 20 centímetros de hormigón armado con barras de refuerzo de acero y detonar dentro de la estructura, según datos aportados por el Ministerio. Esto hace del misil Spike un buen arma para atacar infraestructuras —y no solo como sistema anticarro— "creando un daño inmenso y letal a objetivos estructurales, vehículos y embarcaciones marinas".
El misil en su versión LR2 tiene un peso de 12,7 kilogramos (1,3 menos que su antecesor) lo que le permite incrementar el alcance hasta los 5,5 kilómetros si se dispara desde la superficie o 10 kilómetros si es lanzado desde el aire. Y es que, este sistema puede lanzarse bien desde vehículos terrestres, marinos y helicópteros.
El último lote contemplado por el Ministerio de Defensa comprende 168 puestos de tiro junto con 1680 misiles Spike LR2 y todo el apoyo logístico necesario. Por el momento, la adquisición en firme no se ha publicado oficialmente, pero está en una fase tan avanzada —a falta de financiación— que ya ha comenzado el periodo de entrenamiento, según recoge Infodefensa. Entre los sistemas donde podrá operar en un futuro, se encuentra el VCR 8x8 Dragón que actualmente está en pleno proceso de fabricación.
Versión anterior
En 2006, España decidió comprar un total de 236 puestos de lanzamiento y 2.315 misiles Spike LR Dual que en aquel tiempo era el sistema más moderno disponible. Se distribuyeron entre el propio Ejército de Tierra y en la Armada, donde actualmente siguen totalmente operativos. Además, está disponible en su versión Spike ER para el helicóptero de ataque Tigre, también dentro de las filas del Ejército de Tierra.
Los Spike LR Dual tienen un alcance de 4 kilómetros y capacidad de penetrar a sistemas de blindaje reactivo. Añaden además un sistema de transferencia de información entre el misil y el operador utilizando fibra óptica y en 2014 recibió una pequeña actualización por parte de Rafael que incrementó su cobertura hasta los 5 kilómetros.
Por su parte, la versión aérea denominada Spike ER (Extended Range o Rango Extendido) tiene una capacidad de impacto entre 400 metros y 8 kilómetros. Cuenta con un diámetro sensiblemente mayor, algo más de peso que los otros sistemas. Se estima que España compró unas 200 unidades de este modelo para sus helicópteros Tigre.
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