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Las 5 cosas que tus uñas revelan sobre tu salud

14 enero, 2016 18:21

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¿Sabías que las uñas, a pesar de ser consideradas habitualmente como un elemento decorativo en el cuerpo humano, cumplen una importante función protectora de los dedos de las manos y de los pies? Y no sólo eso. También pueden decir mucho acerca de nuestra salud. Es decir, funcionan como un indicador de lo que está ocurriendo en el interior del cuerpo, por ejemplo si tenemos falta de vitaminas.

El crecimiento de las uñas y sus complicaciones

Las uñas están formadas fundamentalmente por células muertas endurecidas que contienen queratina, una proteína fibrosa producida de manera natural y presente también en otras estructuras, como el pelo, las pezuñas o las plumas. Estas células muertas crecen desde la matriz o raíz situada justo debajo de la cutícula, la zona clara en forma de media luna que se encuentra en la base de la uña. La matriz fabrica continuamente láminas o capas de células, y cada nueva lámina empuja a la antigua hacia fuera de la cutícula, donde empezará a crecer. Un crecimiento anómalo o un cambio de color en la uña quiere decir que algo va mal en la matriz o con el tejido de alrededor.

Por ejemplo, la razón por la que aparecen esas ondas horizontales en la superficie de la uña es  que la matriz deja de producir nuevas células durante un tiempo por no recibir suficientes nutrientes del torrente sanguíneo. Por lo general esto significa que la persona tiene una infección de algún tipo. El cuerpo modifica la distribución de nutrientes priorizando aquellas áreas clave donde tiene lugar la enfermedad (para poder combatir sus síntomas) y deja en segundo plano otras tareas como el crecimiento de las uñas.

Por otro lado, aquellas personas que tienen fiebre alta durante un período de tiempo más largo del habitual,  suelen presentar unos pequeños huecos o agujeros en las uñas. Éstos están asociados a trastornos de la piel como la psoriasis o el eczema, que pueden causar la inflamación de la matriz, produciendo nuevas células de manera desigual.

El significado de los cambios de color

En época de frío, las uñas también pueden cambiar su color habitual y adquirir una tonalidad más azulada. Esto se debe a que las extremidades no reciben suficiente oxígeno de la sangre. El torrente que llega a estas zonas es más oscuro y refleja la luz de forma diferente a través de la piel, y de ahí el color azulado. También las enfermedades respiratorias como el asma o enfisema pueden ser el motivo de que en el torrente sanguíneo no haya la cantidad de oxígeno adecuada.

El síndrome o trastorno de Raynaud es otra causa del cambio de color. Dicha enfermedad se caracteriza por los espasmos que tienen lugar en los vasos sanguíneos de la persona, por lo que se acaba produciendo un estrechamiento de los vasos , reduciéndose el flujo de sangre en las extremidades y originando que las uñas aparezcan de color blanquecino, azul o morado. Cuando la sangre llega más rápidamente por causas como un aumento brusco de temperatura, las uñas recuperan su color normal, aunque los dedos pueden tornarse de un color rojo intenso.

En cambio, existen diferentes razones por las que las uñas pueden ponerse de color amarillo. Normalemente los responsables son los hongos. El trastorno más habitual se conoce como onicomicosis, que desfigura y a veces destruye la uña. Hay diferentes tipos de hongos (organismos microscópicos relacionados al moho y al mildiú) que causan este problema. Estos hongos crecen en la oscuridad, la humedad y el ambiente viciado dentro de los zapatos. Mientras crecen, los hongos se alimentan de queratina, de la superficie dura de las uñas de los pies. Otra causa frecuente es la alteración del sistema linfático (que distribuye los fluidos ricos en proteínas en todo el cuerpo).

Como ves, las uñas protegen la piel de las extremidades al tiempo que pueden ayudarnos a comprobar el estado de salud del cuerpo, y de esta manera detectar ciertos trastornos antes de que se vuelvan más graves.

Fuente | Cleveland Clinic