Este dispositivo controla tu dieta comprobando qué y cuánto has comido
Seamos sinceros, todo el mundo se miente a si mismo, y no importa cuantas ayudas tengamos para controlarnos. Por eso muchas veces las apps relacionadas con la alimentación no suponen toda la ayuda que deberían, ya que aunque lleven un control exhaustivo de nuestros datos dependen de que estos se hayan introducido correctamente por el usuario. Podemos acabar culpando al programa cuando finalmente la dieta no de resultado, sin sacarle todo el partido. El Doctor Edward Sazonov de la Universidad de Alabama cree que la solución está en eliminar el eslabón débil de la cadena, el propio usuario, y obtener los verdaderos datos de otra manera.
No podemos engañarle
El resultado de su investigación ha sido el AIM (Automatic Ingestion Monitor), un dispositivo diseñado específicamente para nuestra cabeza e impreso en 3D que se encarga de monitorizar las veces que masticamos y lo que comemos. Para ello cuenta con un sensor de movimiento, una cámara y una conexión Bluetooth para que esos datos puedan ser usados por una app en nuestro smartphone. ¿Porqué tanta parafernalia si solo importa lo que tenemos en el plato? Ya existen algoritmos capaces de calcular las calorías de un plato solo con hacer una foto, pero las apps basadas en él asumen que vamos a comérnoslo entero cuando la mayoría de las veces no es así (por no mencionar que si tenemos que sacar el móvil para hacerle una foto probablemente no lo hagamos).
Por eso AIM usa el sensor de movimiento para detectar si estamos masticando, siendo capaz de diferenciar ese movimiento de otros como hablar; en ese momento activa la cámara integrada y hace una fotografía del plato o aperitivo que estamos tomando, y registra la masticación. En base a esos datos y a una fotografía final en la que calcula cuánto se ha comido el usuario. La app entonces se encarga de identificar la comida y su valor nutritivo, además de estimar la cantidad exacta ingerida; el resultado son las calorías consumidas y mas datos que son registrados para que el usuario pueda llevar un control mas preciso de su alimentación.
Se estima que inicialmente AIM esté orientado al sector médico, ya que puede ser de gran ayuda para pacientes, pero también le seguiría una versión comercial si las próximas versiones del dispositivo siguen el buen camino.