Los niños también se enamoran
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Lo cierto es que los niños también empiezan a experimentar nuevas emociones en su infancia y a sentir interés por compañeros de clase en la mayoría de casos, muchas veces los niños están ante el primer amor y los padres ni se dan cuenta. Hoy os contamos algunos consejos para actuar ante estas situaciones, porque sí, los niños también se enamora.
¿Cómo actuar ante los primeros enamoramientos infantiles?
1. Escúchale: Tomate en serio sus sentimientos y la gestión que el niño o niña haga de ellos, no te limites a pensar “cosas de niños”, ellos también sufren cuando se llevan una desilusión amorosa.
2. Sé discreto: Si oye que llamas a la abuela y a las tías para contarles la nueva situación, el niño o niña dejará de confiar en ti y no volverá a contarte como se siente.
3. Cuidale: No le hagas bromas de mal gusto sobre el hecho de estar enamorado/a. En algunos casos ya recibe estas bromas por parte de compañeros de clase. Por muy gracioso que te parezca su comportamiento si te ríes solo consigues ridiculizarle.
4. Sin presiones: Nada de hacer reuniones familiares con los padres de la novia o el novio, no hay que darle más importancia de la que tiene, solo forma parte del desarrollo emocional del niño o niña. Pasará y luego solo querrá estar con amigos/as de su mismo sexo.
5. Comprensión: ¿Recuerdas a tu primer amor del cole? A tu hijo/a le pasa lo mismo que te pasaba a ti. No dejes que los problemas de la vida adulta borren de tu memoria esas relaciones inocentes de la infancia.
6. No menosprecies: Evita cualquier comentario despectivo sobre el nuevo amor de tu hijo/a, “ese niño es malo“, “esa niña es antipatica“, estas etiquetas además de ser falsas, hieren a tu hijo/a, ¿o acaso te gusta cuando menosprecian a tu pareja actual?
7. No te adelantes: No les incites a besos o caricias, o cogerse de la mano. En las relaciones infantiles ellos prefieren jugar y divertirse en el patio y no les hace falta ese contacto físico, El psicólogo Rodney Warthon señala que en las edades tempranas tener pareja no es necesariamente sinónimo de besos y caricias.
Recuerda: Sé siempre una figura de apoyo y confianza para tus hijos, si de pequeños pueden hablar contigo sobre sus miedos y sobre sus emociones también los seguirán haciendo en las siguientes etapas del desarrollo.