La mano biónica capaz de sentir
El desarrollo de prótesis para sustituir partes del cuerpo que hemos perdido o que ya son inservibles es uno de los campos mas interesantes de la medicina y la tecnología ahora mismo. El principal problema de estas prótesis es que no pueden “sentir”, no pueden mandar información a nuestro cerebro, asi que nunca pueden ser plenamente funcionales. La mano biónica que os presentamos hoy es un buen ejemplo del desarrollo conseguido en este sentido.
Un hombre holandés que perdió la mano en un accidente con fuegos artificiales es la primera persona que ha podido disfrutar de esta nueva mano artificial, desarrollada en Lausanne, Suiza. La gran diferencia respecto a otras es que con ella es capaz de sentir presión en tres dedos, lo cual mejora enormemente su uso; aunque lo hagamos de manera inconsciente, cuando cogemos algo esperamos algún tipo de sensación que nos informe de que realmente lo hemos cogido, aunque estemos mirando la mano.
Conexiones directas a los nervios
El sistema implica conectar electrodos a dos de los tres principales nervios del brazo del paciente, que transportan las fuerzas detectadas por los dedos en forma de estímulos eléctricos. El paciente se ha sorprendido porque es capaz de detectar diversos grados de presión, ya sean fuertes o suaves, lo cual le permite ejecutar tareas con la mano sin necesidad de mirar.
El principal problema de estas prótesis se da a largo plazo: estudios en ratones duraron entre nueve y doce meses antes de tener que cambiar la “conexión”, pero es un gran avance de cara al desarrollo de futuras prótesis.
Fuente | MIT Technology Review