El cubo de memoria de IBM que solucionará los límites del almacenamiento
Noticias relacionadas
Siempre hemos visto representado de mil y una maneras diferentes las memorias en las películas y series de ficción. Ya fueran varas, bolas, tarjetas o cubos donde se almacenan datos, o de donde se reproducen hologramas. Un concepto que parece que atrae a los grandes fabricantes.
Al menos al consorcio formado por la empresa Micron y Samsung, llamado HMC Consortium, si que les interesa el concepto de cubo de memoria. Y ya trabajan en su diseño, y IBM colabora en su método de fabricación, pues el objetivo es ambicioso y también el concepto no es fácil de realizar. El cubo de memoria es una apuesta arriesgada que quieren comercializar.
La idea surgiría en parte para acabar solventando un problema con el que se encuentra la informática actual,
Ha habido alguna modificación pero en esencia lo que viene a decir es que la capacidad de integración de transistores es limitada. El final para la Ley de Moore estará entre 2013 y 2018, cuando se alcance la fabricación en 16 nanómetros.
Con esta problematica en perspectiva, este particular consorcio ha querido ponerle remedio cuanto antes. Para ello surge la idea de apilar por capas las placas de memoria, ya que su reducción en poco tiempo será imposible. A este concepto se le ha llamado cubo de memoria híbrido. Constaría de una capa lógica, y multiples moldes de circuitos apilados unidos por tuberías de silicio.
Comparado con las memorias actuales DDR3, usando un 70% menos de energía por bit, y en un espacio reducido un 90%, el cubo rendiría un 15% más. Todo esto de todas formas es pura y dura especulación puesto que para llevar a cabo su fabricación, algo en lo que trabaja afanosamente IBM, quedan muchos detalles por pulir y que de momento no han salido a la luz.
Se trata sin duda de una propuesta muy interesante y que podría cambiar los fundamentos por los que actualmente se rige la construcción de componentes para ordenadores. La ley de Moore tiene muy próxima su caducidad y se hace necesaria una alternativa que permita seguir innovando y creando nuevas vías para el avance de la computación. Y nosotros por suerte, lo vamos a ver y vivir. Y si es posible, lo contaremos también.