Desde hace unos años, algunos servicios tanto de Google como Apple presentes en España han estado bajo escrutinio por prácticas monopolistas. Uno de los ejemplos más claros es el sistema NFC de los iPhone, que está bloqueado únicamente para el uso de la plataforma Apple Pay propietaria, valga la redundancia, de Apple. Para evitar problemas con la Unión Europea, Apple se habría ofrecido a abrir este ecosistema finalmente, según adelanta Reuters.
La idea sería sencilla: no solo resolver todos los asuntos que Apple tiene con los organismos antimonopolio de la Unión Europea, sino evitar por completo posibles acciones legales que desemboquen en multas de alto calibre para la compañía. De esta forma, los rivales bancarios de Apple podrían acceder a los sistemas NFC de los iPhone para crear sus propias soluciones.
Ya el año pasado, las autoridades de competencias de la Unión Europea acusaron a Apple de que las limitaciones en la conectividad NFC dificultaba el desarrollo de servicios rivales en dispositivos de la compañía. Así, afirmaba que estos movimientos beneficiaban abiertamente a Apple Pay, el servicio histórico propietario de los de Cupertino.
Abrir el NFC de los iPhone
Estas fuentes anónimas aseguraron que la Comisión Europea ya estaría realizando rondas de contactos con clientes y competidores de Apple para el próximo mes, con el objetivo de dirimir la oferta y decidir si la aceptan o no. No han trascendido detalles sobre estos competidores, que presumiblemente incluirían algunas de las empresas que ya han criticado estos movimientos de Apple con anterioridad.
Es el ejemplo de PayPal, que junto a otras empresas, han criticado duramente el bloqueo de los sistemas NFC de Apple en favor de Apple Pay. Esta y otras compañías habrían tenido un rol clave en las decisiones de la Unión Europea de acusar con quejas antimonoplio este ecosistema. Lo habrían hecho presentando reclamaciones sobre la forma en la que Apple restringe el uso de apps de terceros a las capacidades NFC de los iPhone.
Fue en mayo del año pasado cuando la Unión Europea emitió una demanda antimonopolio en contra de Apple por los servicios de pagos de la compañía, precisamente por restringir el acceso a terceros para que no pudieran usar la tecnología NFC de los dispositivos iPhone. Eso ha llevado a que los servicios que quieran estar presentes en iPhone tengan que usar Apple Pay, con 2.500 bancos contados solo en Europa, presentes en la plataforma.
Y es que como todos saben, los iPhone no permiten pagos si no es a través de Apple Pay; no se permiten servicios de terceros, como lo es Google Pay. Estas acusaciones se suman a las demandas que interpusieron servicios como Spotify debido a la política de pagos fuera de la App Store, que impide que estas compañías informen de otras opciones de compra externas a la tienda.
No es en absoluto la primera vez que Apple recibe acusaciones por cuestiones de monopolio, y mucho menos respecto al NFC de los iPhone. Poco después de que se lanzase Apple Pay, un grupo de entidades bancarias de Australia intentaron negociar el acceso al hardware NFC de los iPhone para crear su propia solución. La Comisión Australiana de Competencia y Consumidores desestimaron sus solicitudes en 2017.
Otro de los cabos por atar por parte de Apple reside en la instalación de apps fuera de la App Store, el proceso llamado sideloading en iPhone. Se espera que el año que viene Apple por fin permita la instalación de aplicaciones externas después de años impidiendo que los usuarios puedan descargar apps que no estén ubicadas en la App Store.