BlackBerry en situación crítica tras caer el 42% sus ingresos

El mundo de la telefonía móvil es un campo de batalla nada bonito. Las guerras de patentes y papeleos en las que se meten Apple, Samsung y Microsoft no son las únicas que existen, aunque si las que más repercusión suelen tener. Existen más marcas que lo pasan mal, y que no corren la misma suerte que las antes citadas peleando por las primeras posiciones.

Tenemos el ejemplo reciente con HP y WebOS, que tuvo que abandonar el desarrollo de dispositivos de terminales con este sistema operativo que compró a Palm. Pero estas cosas se repiten, y no sólo empresas como Nokia, que no levanta cabeza del todo, son las que sufren.

RIM con Blackberry es un claro ejemplo de esto, y es que desde hace una temporada más bien larga la compañía canadiense lo está pasando realmente mal, ya que sus cifras no dejan de bajar y empeorar. De hecho acaban de anunciar que sus ingresos han descendido en un 42% hasta los 2810 millones de dólares durante este último trimestre, procurando una pérdida en sus acciones de un total de 518 millones de dólares.

La principal de este hecho ha sido una disminución en las ventas, que ha pasado de 11,1 millones a 7.8 millones de unidades de hace dos trimestres al anterior, siendo la tablet Playbook una de las más afectadas que ha reducido en un 50% sus ventas.

La primera solución al problema pasará por el despido de 5000 trabajadores durante los próximos 8 meses que pretende recortar costes en 1000 millones de dólares. A esto se une además el retraso de su sistema operativo BlackBerry 10 hasta finales de 2013.

Estos despidos unidos a un retraso así no son buena señal, y todo parece indicar que RIM está al borde de de una situación crítica que podría acabar muy mal, quizás hasta absorbida por otra compañía, ya que sus pésimas cifras empiezan a hacer que su modelo de negocio sea insostenible. Está claro que o cambian de forma radical lo que están haciendo o Research In Motion sufrirá un destino no muy merecido, ya que sería una auténtica pena perder un competidor de la importancia de este.

vía | ITespresso