Probamos Bitcasa a fondo: Almacenamiento sin límites en la nube
Noticias relacionadas
- Office 365, Google Docs y Apple Cloud prohibidos en los colegios alemanes por los datos que recopilan de los menores
- Western Digital y Toshiba pierden millones de terabytes de memoria por un apagón, los precios pueden subir
- Linux ya se usa más que Windows... en la nube de Microsoft
- Revolución en Dropbox: la nueva app reúne todas las apps colaborativas que usas en un sólo sitio
Cuando Google presentó su visión del correo electrónico, tal y como llama a GMail, no sólo rompía con lo habitual hasta la época en la forma de gestionar el correo sino que lo hacía también respecto a uno de los límites que todos veíamos normales, el del espacio disponible. ¿A quién no le pasó que tenía su correo lleno y por ello no pudo recibir algo importante? No sólo es que el tamaño de los archivos adjuntos estuviera limitado (que lo sigue estando) sino que llegaba un momento en que tu buzón decía basta como si fuera físico y las cartas asomaran por el borde.
Aunque pocos en su momento lo hubieran entendido, Google comprendió la cada vez mayor importancia que iba a tener el correo electrónico en nuestras vidas y no sólo nos dio un tamaño de almacenamiento mayor sino que además como prometió no ha parado de crecer. Incluso su injustamente fallido GWave y su ahora exitosa red social G+ de basan en gran parte en esa cada vez mayor preponderancia del correo electrónico, no en vano en mi caso he terminado aprovechando las ventajas de publicar sólo para determinados contactos o grupos en esta red para enviar un mensaje en vez de usar el correo.
Os preguntaréis por qué me remonto a esas épocas tan “antiguas” de internet, pero la razón es que no puedo dejar de comparar en cierto sentido (de momento el del espacio de almacenamiento) la llegada de un servicio como Bitcasa al campo del alojamiento en la nube.
Bitcasa, espacio sin límites
En un momento donde los servicios de almacenamiento en la nube han conseguido pasar de ser conocidos por una minoría a empleados desde por usuarios “de a pie” hasta por grandes empresas una de las primeras preguntas que nos viene a la cabeza a la hora de decidirnos a probar uno de ellos es ¿cuánto espacio ofrecen de forma gratuita? Es algo simple que deja de lado otros valores como la seguridad o la posibilidad de sincronizar o compartir pero que a la larga supone una diferencia importante. Por su parte los usuarios más avanzados y empresas también se plantean otra pregunta que al fin y al cabo viene a referirse a lo mismo ¿qué tarifas tienen para contratar más espacio?. Un tema que ya tratamos en nuestro especial sobre almacenamiento online.
Y es ahí donde llega Bitcasa, un servicio que ofrece alojamiento sin límite de espacio, tal cual. Un reclamo que supone el golpe en la mesa de un recien llegado y un posible vuelco en el mercado actual ya que Bitcasa se anuncia también como un servicio que puede responder a uno de los temas que más preocupan en este tipo de servicios en estos momentos, la seguridad y privacidad de los archivos almacenados gracias al cifrado automático de los mismos por parte de su cliente de escritorio.
Bitcasa sigue como indicamos en su momento en fase Beta cerrada, es decir, de momento en fase de pruebas a la que se puede acceder solicitando tu invitación en su web oficial. Eso fue lo que hicimos hace unas semanas y por fin recibimos nuestra invitación con la que hemos podido echar un primer vistazo a lo que nos ofrecerá la versión final cuando se haga pública.
Tras seguir el enlace de la invitación podemos descargar el cliente de Bitcasa disponible para nuestro sistema operativo (de momento para Windows y Mac, próximamente para Linux). La instalación de Bitcasa para Windows incluye las librerías Microsoft Visual C++ 2010 y curiosamente también Dokan, esa adaptación del sistema de archivos FUSE que ya mencionamos al hablaros de EncFS, ese programa de cifrado para crear carpetas seguras en otros servicios de almacenamiento, es decir, que ya nos podemos hacer una idea de como trabaja el cifrado automático de Bitcasa.
Una vez instalado tendremos que abrir el cliente y
Una vez creada la cuenta el navegador te conducirá a un tutorial de introducción y uso que incluye vídeos demostrativos sobre como acceder a los archivos desde la web, el teléfono, sincronizar ordenadores y por supuesto subir cualquier carpeta al servicio ya sea seleccionándola desde el cliente o arrastrándola sobre él, o seleccionando la opción “Cloudify this” en el menú contextual del explorador que se abre sobre la misma con el botón derecho del ratón lo que permite subir cualquier carpeta desde cualquier ubicación sin tener que abrir el cliente. No, no se puede “cloudificar” un archivo suelto, sino sólo las carpetas.
Al subir a la nube cualquiera de nuestras carpetas el proceso de subida, con barra de progreso incluída, se podrá ver en el cliente. Asimismo, en el explorador de Windows nos encontraremos con que la carpeta que hayamos subido pasa a convertirse en un acceso directo a un disco virtual montado, por otro lado si la carpeta contenía archivos se nos creará una copia llamada “nombrecarpeta.original“, algo de agradecer (y que se supone desaparecerá cuando se salga de la versión beta) ya que el programa como hemos dicho se encuentra en pruebas como me ha demostrado justo a mitad de este párrafo al anunciarme Windows 7 que no tenía recursos suficientes para acceder a una carpeta “cloudificada” y terminar reiniciándose el ordenador tras pantallazo azul cuando intentaba cerrar Explorer y Bitcasa mediante el administrador de tareas.
Puestos en marcha de nuevo y subida alguna carpeta más es la hora de acceder a nuestros archivos, para ello podemos o entrar desde el explorador a la carpeta a través del acceso directo que se ha creado (es como si accedemos a una unidad de red) o haciendo un doble click sobre la carpeta en el cliente de Bitcasa. En esa carpeta podremos ir subiendo más archivos (no se creará una copia automática en la “carpeta.original“) y también podremos desde el cliente desconectarla (como si extrajéramos una memoria flash), volver a conectarla más tarde, borrarla o compartirla. De nuevo el programa deja patente su estado de desarrollo al quedarse bloqueado algunas veces mientras intenta desconectar o borrar una carpeta (momento en que al ir a cerrar Bitcasa que mostraba el típico cartel de “No Responde” se me ha vuelto a reiniciar el ordenador tras pantallazo azul)
Cuando hablamos de la función de compartir llegamos a una de las partes más importantes de los servicios de almacenamiento en la nube hoy en día, sincronizar diferentes equipos y compartir archivos a través de enlaces públicos o crear carpetas compartidas. De momento aunque al crear la cuenta Bitcasa nos pide que nombremos el ordenador desde el que accedemos no es posible sincronizar automáticamente varios dispositivos. Por otro lado la función de compartir no consiste en crear un enlace público que permita descargar el archivo directamente desde el navegador o en crear una carpeta a la que puedan acceder distintos usuarios de forma colaborativa. En el caso de Bitcasa se nos creará un enlace que al pegarlo en el navegador nos llevará a un archivo descargable, pero no el archivo completo sino una especie de redireccionador, algo que recuerda a los archivos .torrent, y es que el destinatario necesitará instalar Bitcasa y tener su propia cuenta para arrastrar ese redireccionador sobre el cliente y que el archivo compartido se descargue directamente a la carpeta de descargas de Bitcasa.
Acceso Web
Como no podía ser de otra forma Bitcasa también permite el acceso vía web con una interfaz muy sencilla dividida en paneles que muestran los contenidos de las carpetas y un reproductor también bastante sencillo que permite reproducir directamente las fotografías y los vídeos alojados (incluyeno archivos .mkv). Si el reproductor no reconoce el formato de archivo nos dará, aparte de la posibilidad de descargarlo en todos los casos, las opciones de verlo como texto, abrirlo en nueva ventana, en un iframe, etc.
Ya hemos dicho que Bitcasa pone su empeño también en la seguridad de los archivos subidos, por ello nos aseguran que nuestra privacidad no correrá peligro ya que es el propio cliente el que cifra los archivos antes de subirlo a los servidores lo que impide el acceso de miradas indiscretas.
Conclusiones
Poco más queda por decir de un servicio que está comenzando y que de momento está entregando a sus probadores diez invitaciones para seguir poniéndolo a prueba.
Para mí ahora mismo sólo se trata de una opción a tener en cuenta por su evolución en el futuro ya que se encuentra todavía muy verde con un funcionamiento inestable. Su principal baza, a falta de incorporar muchas más opciones, es la cantidad ilimitada de espacio, algo con lo que tendrán que luchar el resto de servicios.
Durante el periodo de pruebas Bitcasa es gratuito pero ya sabemos que en cuanto se lance su versión pública pasará a costar 10$ al mes por lo tanto… ¿cuál es su futuro y sus posibles usuarios? 120$ al año por un espacio infinito es algo que atraerá a muchos usuarios medios, avanzados y empresas; sin embargo el usuario base quizás no requiera de tanto almacenamiento y quizás le baste con servicios como Insync que basándose en el almacenamiento en Google Docs y sus planes de precios ofrece por ejemplo 200GB por 50$ al año.
Por último no me queda más que recomendar la traducción al castellano del FAQ que han hecho nuestros compañeros de Wwwhatsnew
Probado con Bitcasa 120126.1