El teletrabajo ha hecho que la importancia de las sillas para trabajar sea cada vez mayor, animando a fabricantes que hasta ahora estaban al margen de este sector a meter la cabeza en él. Ahora Volkswagen ha mostrado un curioso prototipo, que no pondrá a la venta ni en España ni en cualquier parte del mundo, y con el que demuestra su capacidad para imaginar cómo sería llevar sus tecnologías punteras de vehículos a un accesorio de oficina como este.
La empresa explica que la silla está diseñada para dar a quienes trabajan en una oficina una idea de lo que es trabajar en uno de sus vehículos comerciales, por tanto, la silla permite conducir, tocar la bocina o escuchar música. Lo cierto, es que está pensada para que pueda ser conducida por la oficina.
Cuenta con pedales para acelerar o frenar como si de un coche real se tratase y es que se puede ir a toda velocidad por el pasillo de la oficina alcanza los 20 kilómetros por hora. Dispone de un silencioso motor eléctrico con una autonomía de 12 kilómetros.
Silla de oficina de Volkswagen
Para moverse de una forma correcta y fiable cuenta con cinco ruedas que le permiten maniobrar con precisión. Y es que las ruedas tienen diferentes tamaños y grosores para diferenciar tanto la tracción como la dirección con llantas de aluminio de hasta 4 pulgadas.
Asimismo, viene con una serie de tecnologías propia de los vehículos de la marca como cámara de visión trasera y sensor de impacto de 360 grados, altavoces y sistema de entretenimiento con música, luces LED de colores, bocina, intermitentes y cargador USB.
Pero si hay algo importante en una silla es el confort. Esta silla cuenta con una ergonomía perfecta, un asiento cómodo y acolchado, amplios reposa brazos e incluso bola de enganche para arrastrar a otros compañeros o distintas cargas. Además, cuenta con un pequeño almacenamiento a modo de maletero en el que poder llevar una leve carga.
En cualquier caso Volkswagen ha aclarado que esta silla completamente funcional sólo se trata de un único modelo y no tiene previsto ni producir ni comercializar pese a la gran aceptación que ha tenido. Se quedará así pues como un reclamo comercial para presumir de cómo de buenas son sus furgonetas profesionales.